Figueres convierte a Dalí y Gala en independentistas

Figueres ha engalanado a los gigantes del artista Salvador Dalí y su esposa Gala con lazos amarillos con motivo de la Fiesta de la Santa Creu. Los dos ninots han lucido este símbolo a favor de la independencia de Cataluña pese a que los personajes a los que representan nunca expresaron su apoyo a la secesión.

De hecho, la historia apunta a que el pintor y escultor no era contrario a la dictadura de Franco, dado que nunca la criticó durante sus años de vida. Una de sus frases emblemáticas ilustran su ideología política, alejado del bando republicano. “Picasso es un genio. Yo también. Picasso es comunista. Yo tampoco”, expresó Dalí en su momento.

Regresó durante la dictadura

A diferencia de muchos otros artistas Dalí, que vivió en el extranjero durante varios años, regresó durante la dictadura. La vuelta del pintor, en 1948, desató las críticas de muchos de sus compañeros que tuvieron que exiliarse, así como de los sectores progresistas.

Otro ejemplo de su ideología es que, poco antes de morir, el artista dejó como “heredero universal de todos sus bienes, derechos y creaciones artísticas al Estado español”, tal y como recoge la cláusula tercera de su testamento. Este documento, de 1982, reemplazó al de 1980 en el que había repartido sus bienes entre el Estado y la Generalitat de Cataluña.