La explosión del bar Champi, en el Eixample de Barcelona, que ha dañado ocho edificios, ha tenido afectaciones también en la movilidad. Los conductores que a primera hora de este martes han circulado por la Ciudad Condal se han encontrado con dificultades para cruzar algunas de las vías cercanas al número 73 de la calle València.
La Policía Local ha cortado el tráfico entre las calles Calàbria y Rocafort accediendo desde Aragón. Sin embargo, la avenida Roma está abierta a los vehículos. Tampoco los viandantes pueden acceder si no es por motivos justificados. Pocos minutos después de las diez de la mañana la circulación se ha restablecido.
Los vecinos, conmocionados
Los vecinos de este barrio siguen conmocionados por una explosión que se ha producido este martes poco antes de las cuatro de la madrugada. Un estallido que ha generado virulentas llamas por las fachadas y que ha calcinado todo el edificio. Pero también se han visto afectadas varias fincas de la calle Rosselló y la avenida Roma.
La estructura ha quedado muy dañada, pero los residentes podrán regresar a sus casas en las próximas horas, excepto los de dos viviendas --en la avenida Roma, 90 y València, 73-- que se han visto muy afectadas.
Las seis personas que ahí viven no podrán volver, por el momento. Así lo ha dicho el jefe de intervención de los bomberos de Barcelona, Víctor Molinet.