Decenas de dotaciones de bomberos de la Generalitat han trabajado durante toda la noche para tratar de controlar el incendio declarado ayer sobre las 23:15 en la localidad de Roses (Girona). Las fuertes rachas de viento de la tramontana, que han alcanzado los 70 kilómetros por hora, lo han hecho ingobernable y las llamas han devorado 400 hectáreas de terreno forestal del Parque Natural de Cap de Creus.
El fuego se ha originado en la zona de Mas Oliva y el viento ha desplazado las llamas hacia el suroeste, dejando a varias personas aisladas en cala Montjoi y cala Jòncols. Además, la carretera de acceso a esta zona ha quedado cortada.
Trabajan 40 dotaciones terrestres
Aunque durante la noche los bomberos han conseguido controlar la cola y el flanco izquierdo del fuego, el incendio sigue activo. Preocupa el viento, que esta mañana sopla con menos fuerza. En el dispositivo trabajan 40 dotaciones terrestres de los Bomberos de la Generalitat, que cuentan con 20 vehículos de agua, las unidades GRAF (Grupo de Actuaciones Forestales), EPAF (Equipo de Prevención Activa) y GROS (Grupo Operativo de Apoyo).
Si la previsión ayuda y el viento no reactiva las llamas, los bomberos esperan dar por estabilizado el incendio durante la mañana de este martes.
President Aragonès
El presidente del Govern, Pere Aragonès, ha pedido la "máxima precaución" a "todo el mundo" después de que alcaldes de la zona denunciaran que algunos ciudadanos se arriesgaron para grabar vídeos del suceso.
El jefe del Ejecutivo ha indicado que se encontraba "siguiendo las novedades" y ha expresado su "confianza" en los equipos que trabajan en el lugar.