Científicos de 14 universidades y centros de investigación de Cataluña y Francia han advertido del “impacto negativo” que tendrían unos Juegos Olímpicos (JJOO) de Invierno en los Pirineos. Los más de 150 miembros firmantes del manifiesto han expresado su preocupación por las consecuencias de estos eventos deportivos en la cordillera.

La propuesta de la candidatura olímpica, por parte del Govern, es, en palabras de la plataforma Manifest Jocs Olímpics d’Hivern, poco transparente. Han considerado, además, que los Juegos “solo se podrán realizar con un aumento del consumo de energía, de agua y de contaminación”.

Aumento de temperaturas

Los científicos han calculado que, si se mantiene el ritmo actual de aumento de emisiones, la temperatura en los Pirineos puede incrementarse entre 1º y 2,7º en 2030. De hecho, según los firmantes del manifiesto, podrían alcanzar un aumento de entre 1,4º y 4º en 2050, en función de si se estabilizan o se mantienen al alza las emisiones de gases de efecto invernadero.

La estación de esquí de Boí-Taüll (Lleida), uno de los destinos más populares de estas fiestas / BOÍ TAÜLL

Este cambio climático que predicen los investigadores afectaría a las estaciones de esquí. El estudio considera que el 20% de estas infraestructuras serían inviables y el 76% tan solo podrían abrir con nieve artificial. En el caso de que las cifras se estabilicen de aquí a 2050, las cifras rondarían entre el 7% y el 70%, respectivamente.

Agravaría el desequilibrio

Estos 150 científicos, entre los que se pueden nombrar Ermengol Gassiot, de la UAB-CSIC; Andreu Ubach, del museo de ciencias naturales de Granollers; Ariadna Nieto, de la UdL; o Frederica Ravera, de la UdG; creen que los JJOO no aportarían riqueza a los Pirineos. Las olimpiadas de invierno “enfocarían aún más” la zona al modelo de turístico masivo, han expresado.

Los investigadores consideran que la propuesta del Govern para la celebración de los JJOO agravaría el desequilibrio y la dependencia que “sufren las comarcas pirenaicas”. En este sentido, han recordado que los cambios en infraestructuras de determinadas pistas de esquí pueden poner en riesgo la preservación de yacimientos arqueológicos, mientras han remarcado que la Generarlitat “ha rescatado siete estaciones de los Pirineos por no ser rentables económicamente”.

Este manifiesto ha llegado en pleno debate sobre la candidatura olímpica, con la fisura autonómica entre Aragón y Cataluña por su celebración, y la primera comisión bilateral entre el Conselh Generau y la Generalitat en el Parlament. En este último caso, la síndica de Aran, María Vergés, ha pedido unos JJOO “sostenibles y respetuosos con el territorio”, que ha concluido con una pregunta a los diputados: “¿Por qué Barcelona 92 tuvo la posibilidad de transformarse y por qué el Pirineo no lo puede hacer?”. Las inversiones, al final, son la dependencia que las comarcas pirenaicas demandan y que ven en este evento una oportunidad para lograrlas.