Los Mossos d’Esquadra han denunciado penalmente a un vecino de Caldes de la Malavella (Girona) que dejó morir a su perro de desnutrición severa tras encerrarlo en un taller de coches ilegal que regentaba en el municipio de Cassà de la Selva.
Inicialmente, los Mossos acudieron al taller tras tener conocimiento de que el sujeto estaba desarrollando esta actividad sin autorización, por lo que fue denunciado también por la vía administrativa.
Condiciones insalubres
Durante la inspección, los agentes observaron varios vehículos que estaban siendo reparados en la parte exterior de un recinto. Los Mossos escucharon ladrar a un perro en el interior del taller y tras acceder, descubrieron que el animal vivía en condiciones insalubres. Junto a él descubrieron el cadáver de otro perro, de raza American Standford, rodeado de heces.
Los agentes recogieron el cadáver del animal y lo llevaron a un centro veterinario especializado para la realización de una necropsia, que concluyó que el animal había fallecido a consecuencia de una severa desnutrición. El perro, que vivía aislado y privado de alimentos, experimentó un grave sufrimiento.
Otra denuncia por la vía administrativa
Tras recibir las conclusiones de la necropsia, los Mossos denunciaron penalmente al inquilino del local, de 59 años, nacionalidad española y vecino de Caldes de Malavella, como presunto autor de un delito de maltrato animal.
Además, sobre él pesa otra denuncia por la vía administrativa por desempeñar una actividad profesional en un taller mecánico que carece de las autorizaciones pertinentes del ayuntamiento de Cassà de la Selva. El caso está siendo instruido por el Juzgado de Instrucción de guardia de Girona.