El Govern ha flexibilizado las visitas y salidas en las residencias de mayores o personas con discapacidad, una decisión que llega en un momento en el que 512 centros tienen algún caso de Covid activo y se han duplicado los positivos en solo una semana: de 1.618 a 3.227.
Pese a estos datos y la elevada incidencia del virus en Cataluña, las consejerías de Salud y Derechos Sociales han autorizado visitar o realizar salidas en los centros en zona roja –con casos activos–, aunque solo a los residentes que se encuentren en zona verde –libre del virus–, siempre y cuando sus contactos estrechos estén correctamente inmunizados.
Se mantiene el pase Covid o test
En este sentido, la Generalitat mantiene el máximo de dos familiares por persona, los cuales deberán presentar el certificado Covid para poder acceder al centro o, en caso de no disponer de él, se les ofrecerá hacerse un test de antígenos para poder acceder.
Las personas residentes contagiadas que muestren síntomas leves o sean asintomáticas estarán en zona roja durante diez días. Estas también podrán recibir visitas de sus familiares –también un límite de dos– con cita previa y en espacios individualizados. Además, se refuerzan las medidas de protección, por lo que los visitantes deberán llevar mascarilla FFP2.
Normas para los trabajadores
Por su parte, los trabajadores positivos que pasen el virus de forma leve o sin síntomas, se podrán reincorporar a su puesto una vez transcurridos los siete días de cuarentena, siempre que previamente permanezcan asintomáticos un mínimo de tres días y tengan un test de antígenos rápido (TAR) con resultado negativo.
Aun así, se recomienda que los primeros días tras su vuelta se incorporen en un espacio catalogado como zona roja siempre que sea posible, o bien en espacios donde no tengan contacto con residentes de zona verde, una norma que debería mantenerse hasta el décimo día.