Un total de 485.000 vehículos saldrán del área metropolitana de Barcelona entre las 15.00 horas de mañana viernes y la misma hora del sábado, 30 de octubre, según la previsión del Servicio Catalán de Tráfico, que ha pedido que en la medida de lo posible se evite circular el próximo lunes por la tarde, para evitar retenciones. En ese día se calcula que entre las 12.00 y las 00.00 horas regresarán hacia la primera corona metropolitana de Barcelona unos 265.000 vehículos.
Tráfico ha solicitado que, durante el fin de semana, y especialmente el próximo lunes, se planifiquen los trayectos y que se evite en la medida de lo posible circular en la franja horaria entre las 17.00 y las 21.00 horas del lunes, en que se prevé una cifra más elevada de desplazamientos.
1.158 controles
A partir de mañana, Tráfico desplegará un dispositivo especial para tratar de minimizar las afectaciones hacia destinos de montaña y del interior, como la C-16, C-17, C-14, C-55 y N-145, así como la AP-7, entre otras. Entre mañana y el lunes, los Mossos d'Esquadra realizarán 1.158 controles en la red viaria catalana, de los que 303 serán de drogas y alcohol. Se trata de la primera operación de tráfico de este otoño, una vez superadas las restricciones de la pandemia, en que se prevé que las vías con una mayor movilidad serán las que van hacia destinos de montaña y hacia Andorra.
Además, también se esperan retenciones importantes en la AP-7, la B-23 y la C-58, tanto en la salida como en el regreso. Según Tráfico, el lunes también se podría complicar la circulación en la A-2, en los tramos de Jorba y entre Castellolí y Abrera.