¿Son realmente peligrosas las cookies de las webs?

Cuando se trata de ciberseguridad hay algunos temas que siempre salen a relucir. Y es que, en la actualidad, resulta indispensable hacer un uso adecuado de Internet para no correr riesgos.

Con la RGPD a la orden del día, las cookies son un elemento esencial en cualquier tipo de web. Y estas cuentan con una serie de mitos y verdades que debes conocer para que decidas aceptarlas o no, con argumentos válidos.

¿Qué son las cookies?

Antes de hablar sobre sus mitos y verdades, es indispensable que tengas claro lo que son las cookies. Con este término se hace referencia a ficheros de las páginas web que visitas y el navegador almacena en el disco duro de tu ordenador, los cuales contienen información. Cuando “aceptas las cookies” estás concediendo el permiso necesario para que la página web guarde información en esos ficheros y pueda leerla en el futuro.

Es importante que sean expertos como una agencia de SEO en Valencia quienes te ayuden en estos aspectos de tu web para sacarle el mayor rendimiento posible en lo referente al marketing y ventas.

Tipos de cookies

Esta información será breve, pero es esencial para informarte respecto a los tipos de cookies que existen y así puedas entender mejor su funcionamiento. Según el editor que emite la cookie: Propias: uso exclusivo de un sitio web. De terceros: pueden ser almacenadas y leídas por otras páginas.

Según su duración en tu ordenador: De sesión: existen mientras estás en el sitio web. Persistentes: se alojan en tu ordenador por un tiempo tras haber abandonado la página.Por último, según su propósito: Técnicas: indispensables para el correcto funcionamiento de la web. De personalización: almacenan información sobre tus preferencias, como el idioma o la moneda. Publicitarias: rastrean acciones y registran información sobre tus intereses con fines comerciales.

Mitos y verdades sobre las cookies

Existen una serie de inquietudes que manifiestan con mayor frecuencia los usuarios de internet a los especialistas de esta respecto a las cookies, las cuales se han extendido tanto que ya son mitos, así como sus verdades correspondientes.

A continuación detallamos las más significativas.

Son un malware, como gusanos o virus y pueden borrar tu información

Ya hemos aclarado antes que las cookies son ficheros cuya única función es el almacenamiento de información.

No son programas, por lo tanto no pueden ejecutar acciones ni borrar datos del ordenador.

Generan ventanas emergentes, contenido basura y tienen fines publicitarios

Las cookies solo se utilizan para guardar información relativa al uso de una página web, por lo tanto no pueden abrir ventanas emergentes. No solo están destinadas a fines publicitarios, también mejoran tu experiencia de navegación y en algunos sitios web dedicados al comercio electrónico son útiles para mejorar el funcionamiento del carrito de compras.

Por último, cualquier página web puede generar contenido basura aunque no se acepten las cookies que solicita, de modo que esto no es condicionante para obtener una experiencia de navegación satisfactoria.

Almacenan tu información confidencial

Las cookies guardan información sobre tus preferencias en sitios web, tales como el idioma, productos que has marcado como favoritos o añadiste al carrito en algún momento.  Además pueden registrar las páginas que visitaste y el tiempo que has permanecido en ellas pero son completamente anónimas, por lo que no se vinculan con ninguna persona en particular. Como puedes apreciar estos datos no son del todo confidenciales, se trata de información genérica que se utiliza con la finalidad de conocer el uso que le das a internet y ofrecerte una mejor experiencia, pues a partir de ella se sugieren otros sitios que pueden ser de tu interés. Solo pueden ser leídas por la propia página donde las has aceptado

No necesariamente, esto solo se aplica con las cookies de uso propio, donde efectivamente la lectura de la información registrada únicamente puede hacerla el mismo sitio web. Sin embargo, algunos sitios web informan que trabajan con “cookies de terceros”, lo cual significa que si aceptas, les están concediendo el permiso para leer los ficheros que otras páginas hayan almacenado en tu ordenador. Es por esto que si realizas la búsqueda online de un producto en particular, posiblemente te encuentres con publicidad relacionada en las siguientes navegaciones que hagas por la web, aún en otros sitios.

Son seguras, no hace falta leer el mensaje que aparece al pie de cada página

Las cookies son seguras dependiendo de la página web que las solicite. Al respecto se debe tener en cuenta que estos ficheros son capaces de almacenar todo tipo de información, básicamente registran tu actividad mientras estás en el sitio. Aunque no es lo usual, dependiendo de la calidad del trabajo realizado por el programador que configuró la página, es posible que se almacene tu usuario y contraseña. Con lo cual estaría quedando un registro de esta información privada en otro lugar diferente a tu memoria o agenda personal y representaría un riesgo vulnerable por ciberdelincuentes.

Por lo general, los sitios web de agencias bancarias y otros sectores que manejan información confidencial no utilizan cookies, de modo que la privacidad de tus datos está garantizada siempre y cuando visites las páginas oficiales y te cerciores de que cuentan con el certificado de seguridad representado por un candado cerrado al inicio de su URL.

Sin embargo debes procurar utilizar una contraseña diferente para cada sitio, pues si usas la misma para todos los casos, ante el robo de estos datos en cualquier otra página, el resto de tu seguridad estará en riesgo.

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