El ladrón que atracó un supermercado de Lleida e hirió con una navaja a una gente de los Mossos ha sido condenado a cuatro años y seis meses de prisión. El hombre, de 54 años y con antecedentes penales, ya había sido enviado previamente a prisión provisional y finalmente el juicio oral, que se celebró ayer, ha terminado en condena.
El Juzgado Penal 3 de Lleida ha dictado sentencia contra E.G.M. por una tentativa de robo violento en un establecimiento de la cadena BonÀrea, unos hechos que tuvieron lugar el pasado 7 de mayo. Además, le condena por un delito de atentado contra un agente de la autoridad y otro de lesiones.
Había consumido drogas
El ladrón había consumido drogas en el momento del atraco, algo que se ha tenido en cuenta como un atenuante por intoxicación plena por sustancias estupefacientes. En este estado, entró en el supermercado y amenazó a las trabajadoras con una navaja de 12 centímetros para robar el dinero que había en la caja.
El agente herido es miembro del área de refuerzos regionales de los Mossos (Arro), cuyos efectivos casualmente escucharon los gritos que venían del local y vieron salir al ladrón con la navaja en la mano. En ese momento, el agente se abalanzó sobre él y consiguió reducirlo, pero sufrió heridas leves.
Inacción de la Generalitat
El sindicato USPAC, que se ha encargado de la defensa del agente, ha criticado en un comunicado que la Generalitat descartara formar parte de la acusación “porque no veía suficientemente grave que un miembro de los Mossos fuese agredido con una navaja”. “Tal vez tendremos que cambiar el uniforme por el de un manifestante violento para que la Consejería de Interior nos defienda”, ha reprochado la organización.
Además de la pena de prisión, la sentencia también ha concedido al mosso una indemnización de 2.200 euros por haber estado una semana de baja. Es la cantidad que reclamaba el sindicato, por encima de los 350 euros que pedía la fiscalía, que también ha recibido críticas de USPAC porque “hacía más de defensa que de acusación”.