Manel Gasch i Hurios ha sido nombrado nuevo abad del Monasterio de Santa Maria de Montserrat en sustitución de Josep Maria Soler, que presentó su renuncia al cumplir 75 años.
La comunidad benedictina lo ha elegido este miércoles por la mañana y ya ejerce el gobierno de la congregación. Aunque Gasch todavía debe esperar la bendición abacial para cumplir todos los trámites del nombramiento.
Elogios para Soler
La elección se ha realizado en una reunión capitular a la que han asistido los monjes profesos solemnes de la abadía, presididos por Guillermo Arboleda, abad presidente de la Congregación Benedictina Sublacense Cassinesa.
Gasch ha agradecido el servicio de Soler, que "a lo largo de 21 años ha guiado la comunidad con espíritu de sabiduría y generosidad". Sin embargo, el padre no ha hecho ninguna mención a los escándalos sexuales que han afectado al monasterio en los últimos años.
Abusos sexuales
Hace solo tres meses, Soler apartó de sus funciones a un monje tras recibir la notificación de una denuncia por presuntos abusos sexuales a un menor de 17 años, en 2019. Precisamente, en aquel año se conoció otro caso de abuso por parte del religioso Andreu Soler, a quien la comisión rectora definió como un "depredador sexual y un pederasta".
Una de sus víctimas, Miguel Hurtado, acusó a la hermandad de esconder las agresiones de este sacerdote a varios menores. Tal y como publicó Crónica Global, ni Montserrat ni otras instituciones eclesiásticas cuentan con suficientes protocolos para detectar y denunciar estos casos.