Sindicatos de Mossos d'Esquadra y Guardia Urbana de Barcelona alertan de que ya se puede hablar de "ola de violencia" en los botellones nocturnos que tienen lugar en paralelo a algunas fiestas populares. La parte social pide "más recursos" ante el "descontrol" que generan estas concentraciones, que en el caso del barrio de Sants de Barceona acabaron en enfrentamientos con la policía.
Lo ha dicho un portavoz de Uspac, que ha alertado en declaraciones a El Mundo de la "percepción de ausencia de autoridad" por parte de grupos de ciudadanos durante las aglomeraciones alcohólicas. Ante ello, se impone una "respuesta firme y rápida" de la fuerza pública por cuanto están aumentando las agresiones a los policías. Sin perjuicio de que los fiesteros incumplen las restricciones sociales para controla el Covid-19.
"Actuaciones casi imposibles"
Desde SAP-Fepol, Toni Castejón ha alertado de que la dispersión de las multitudes es una actuación "casi imposible" para los funcionarios, pues éstos se encuentran en franca minoría ante decenas e incluso centenares de personas.
Esta situación demanda, ha agregado Castejón, un trabajo preventivo para "asumir las cargas policiales", pues en estos momentos la situación está fuera de control. Asimismo, desde SAP-Fepol ven necesaria más formación, más efectivos y material para los policías.
CSIF-Urbana: "No nos dejan actuar"
En representación de CSIF-Guardia Urbana, Eugenio Zambrano, portavoz de Administración Pública del sindicato, ha recordado que "ya se están creando guerrillas urbanas que ponen en peligro a las personas y bienes". Lidiar con estos grupos, conlleva aumentar el personal desplegado, pues ahora es solo la UNOC de la Urbana quien tiene que desalojar a estas turbas, indica CSIF.
"El problema es que la Jefatura de la Guardia Urbana y la tenencia de alcaldía de Prevención y Seguridad pone obstáculos a las actuaciones o las impiden. Con ello se pone en riesgo la integridad de las personas, de los funcionarios municipales y el mobiliario urbano que pagamos todos los barceloneses", ha apostillado Zambrano.