El Departamento de Salud dio vacaciones a su personal contratado de forma temporal para apoyar el rastreo de contactos de positivos en plena explosión de la quinta ola de coronavirus en Cataluña. La consejería de Josep Maria Argimon (JxCat) envió a descansar al equipo de Vigilancia Epidemiológica de Barcelona Norte y el Maresme con las peores cifras de contagios de Europa.
Lo ha denunciado CGT, quien ha precisado que el personal de apoyo al soporte al rastreo del norte de Barcelona y el Maresme se ha encontrado al 30% de su plantilla hasta este lunes, cuando se ha incorporado a más personal. Ello no fue voluntario pues, según el sindicato, Recursos Humanos de la Generalitat de Cataluña "amenazó" a los trabajadores para que "cogieran vacaciones". En caso de no hacerlo, la misma área alertó a los empleados de que "no serían remuneradas".
Explosión de casos
Las vacaciones del personal de apoyo al rastreo, que provocó una reducción en el número de la plantilla, coincidió con una avalancha de contagios con el virus SARS-CoV-2. Sobre todo entre la gente menor de 30 años.
Pese a ello y el colapso de la atención primaria, Salud redujo el equipo de Vigilancia Epidemiológica de Barcelonès Nord y Maresme de 20 personas a entre cuatro y seis, según la parte social. Esta mañana se ha incorporado a más personal. Estos nuevos empleados, no obstante, se deben formar.
Ayudan al rastreo
¿Qué hace la plantilla que se marchó de vacaciones en plena quinta ola? Se trata de "encuestadores" de la red de vigilancia epidemiológica autonómica. Son trabajadores que llaman a los positivos con Covid-19, la infección que causa el patógeno, y les preguntan qué contactos estrechos han tenido.
Esta información se compila y traslada a los rastreadores de Salud, que están adscritos a la atención primaria desde que el Govern rescindiera el contrato externo de rastreo con Ferrovial. Son estos los responsables de avisar a los posibles contagiados para apremiarlos a que se realicen una PCR o test de antígenos.
Las peores cifras de Europa
Cabe recordar que Cataluña presenta en estos momentos una positividad del 30%. Esto significa que de todos los test de detección del virus que se practican, casi tres de cada diez salen positivos. La cifra sextuplica la recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para considerar que la pandemia está controlada.
La incidencia acumulada es de 848 puntos, la peor de la Unión Europea. La velocidad de reproducción se sitúa en 1,93 enteros, lo que significa que cada positivo con Covid-19 provoca casi otros dos contagios. Por ello, los sindicatos sanitarios consideran clave realizar de forma correcta los controles de los ciudadanos que sean portadores del virus para frenar la situación.