Los Mossos d'Esquadra detuvieron el miércoles a un hombre de 42 como presunto autor de 36 delitos de robo con fuerza en el interior de domicilio, en grado de tentativa.
La madrugada del pasado 19 de junio, vecinos del municipio alertaron a la policía catalana de la "presencia sospechosa de un individuo" en la calle de Sant Cugat que observaba continuamente las diferentes casas de la zona.
Marcadores en las puertas
Unidades de la policía, alertadas a las 1:20 horas de esta presencia, se dirigieron a la zona y hallaron en la confluencia de esa calle con la de Mestre Muntaner a una persona que coincidía con la que le habrían descrito como sospechosa. Tras cachearla e identificarla, fue puesta en libertad sin indicios de hechos ilícitos.
Durante la inspección de la zona, los agentes localizaron 36 casas que tenían marcadores en las puertas para posteriormente intentar entrar en ellas --una de ella presentaba daños--, y se emitió una orden de búsqueda y detención del presunto autor.
'Modus operandi'
El detenido tiene antecedentes por hechos similares en diferentes ciudades de Europa y pasó a disposición judicial el pasado viernes.
En todos los casos, el detenido usó un hilo fino de cola y un trozo de plástico casi imperceptible para marcar las puertas de casas y garajes en los que quería robar. Pasadas unas horas o días, esta persona volvía a revisar los accesos y, si se mantenían el hilo y el plástico, quería decir que la vivienda o el garaje estaba desocupado.