La puesta en marcha de los puntos móviles de vacunación en Cataluña ha estado marcada por el caos por el perfil de las personas que esperaban desde primera hora para recibir la vacuna de Jansen, que solo necesita una inoculación. El grueso de ellos eran jóvenes menores de 35 años, el grupo de edad en el que se concentran los nuevos contagios. Aun así, no la han podido recibir por no cumplir con el perfil sanitario por el que están pensados estos espacios de inmunización sin cita previa.
Solo atienden a los catalanes mayores de 40 años que aún no han sido vacunados y a los menores que o bien están en situación de vulnerabilidad y no disponen, por ejemplo, de un domicilio fijo, o sufren carencias digitales y no pueden reservar una cita a través de los canales habilitados por el CatSalut. Es decir, colectivos en los que los contagios pueden ser o bien masivos o pueden desencadenar un Covid complejo.
Tensión en las colas
El personal de Cruz Roja que gestiona las unidades móviles de vacunación, vehículos facilitados por la automovilística Seat y el Banco de Sangre y Tejidos, ha comunicado a los que no iban a ser inmunizados que debían abandonar la cola. Ha sido en ese momento en el que se han vivido escenas de tensión que no han ido a más. Los jóvenes insistían en que el boca a boca les había informado de que sí podrían recibir la vacuna, como ocurrió en el piloto que este fin de semana tuvo lugar en el CAP Ramón Turró de Barcelona. Al final, muy pocos han abandonado la cola. La mayoría han recibido la inoculación de Jansen al alegar ante los responsables que eran vulnerables.
Finalmente, han tenido que abandonar la cola. El consejero de Salud, Josep Maria Argimon (JxCat), ha intentado aclarar el caos que se ha generado en su entrevista matutina en la televisión pública catalana, TV3. El doctor ha recordado que “a los menores de 40 años se les dirá que no se pueden vacunar” y ha pedido que todos los que se acerquen a los puntos móviles cumplan con el perfil.
Hasta 1.400 vacunados al día
Con su puesta en marcha se intenta avanzar lo más rápido posible en la inmunización de los colectivos más sensibles al virus. Son seis unidades repartidas por el territorio y se calcula que podrán inocular hasta 1.000 personas al día en los camiones de cuatro posiciones y hasta 1.400 en los que sean de seis.
Funcionan de forma paralela a los llamados popularmente vacunódromos en los que el acceso es con cita previa. En este sentido, cabe destacar las quejas de los colectivos que cumplen con los requisitos para acceder a la vacuna por la falta de horas disponibles, especialmente en Barcelona. CatSalut informa que las horas disponibles se van liberando a lo largo de todo el día y pide paciencia.