Un modelo matemático creado por la Universitat Rovira i Virgili (URV) permite calcular "con precisión" el nivel de contaminación del aire que provocan los cruceros en la zona metropolitana de Barcelona, según ha informado el centro en un comunicado este jueves.
Los resultados se obtienen mediante herramientas de aprendizaje automático e indican que la contribución global de los cruceros en el incremento de contaminantes en la capital catalana es "relativamente modesta". Para establecer este criterio, se compara con el impacto que generan todos los buques del Puerto de Barcelona.
“Valores negligibles”
El cálculo de la contribución de un crucero adicional en el Puerto de Barcelona, sobre los niveles de óxidos de nitrógeno que hay en las zonas más cercanas, es de 1,3 microgramos por metro cúbico, respecto a un valor medio de más de 40 microgramos por metro cúbico. En la misma línea, el aumento de óxido de nitrógeno asociado a estos buques en los barrios más alejados disminuye "hasta valores negligibles" de menos de 0,05 microgramos por metro cúbico y por barco. Esta situación se produce en localizaciones como por ejemplo Palau Reial y la Vall d'Hebron.
La metodología del estudio se puede aplicar a cualquier otra zona urbana en la que haya datos históricos de concentración de partículas contaminantes, meteorología e intensidad del tráfico. También se pueden tomar en consideración otros factores que pueden tener impacto en la calidad del aire, como es la actividad industrial.