Tres manifestantes han aceptado este miércoles hasta 18 meses de prisión por su participación en los altercados durante el desalojo del Banc Expropiat, del barrio de Gràcia, en 2016.
Durante el juicio, en el Juzgado Penal 13 de Barcelona, los tres han admitido los delitos de desórdenes, lesiones leves y atentado a agentes de la autoridad, tras un acuerdo con la fiscalía, que inicialmente reclamaba penas de hasta cuatro años y diez meses de cárcel.
Pena en suspenso
Dos de ellos han sido condenados a un año y medio de prisión y el tercero a cuatro meses, y ninguno entrará en la cárcel ya que el juez ha aceptado suspender la pena a condición de que no vuelvan a delinquir en los próximos dos años.
También han pactado una multa de 325 euros cada uno por desórdenes, 60 euros más por lesiones y un total de 1.620 euros en responsabilidad civil para tres agentes de Mossos d'Esquadra.
Protesta para recuperar el local ocupado
El escrito de acusación de la fiscalía se refería a la protesta del domingo 29 de mayo de 2016, cuando se convocó una manifestación con la intención de recuperar el local ocupado, que había sido desalojado el lunes de la misma semana.
La protesta terminó sin detenciones y con siete mossos heridos tras los enfrentamientos entre manifestantes y policía.