Prohibido fumar en cuatro de los diez arenales de Barcelona este verano. Se trata de una prueba piloto del consistorio en las playas de Sant Miquel, Somorrostro, Nova Icària y Nova Mar para "preservar la salud de la ciudadanía".

En un comunicado, el ayuntamiento ha detallado que esta semana iniciará una consulta pública para recabar la opinión de vecinos, entidades y organizaciones sobre la decisión de mantener el humo alejado de los arenales.

Salud y medioambiente

Además de por motivos de salud, el gobierno municipal también busca proteger el medioambiente. "El tabaquismo es la principal causa de muerte evitable en España. En Barcelona cada año se registran 2.200 fallecimientos atribuibles al consumo de tabaco, lo que supone el 13,8% del total", han señalado.

Subraya que los menores que acuden a las playas "sufren una carga importante de morbilidad a causa del tabaco", que contiene "más de 4.000 compuestos, de los cuales 50 han sido clasificados como carcinógenos".

Estudio europeo

Argumenta, además, que un proyecto en 11 países europeos evaluó el humo ambiental del tabaco en entradas de escuelas de primaria y parques. Los resultados mostraron que en el 41% de los primeros y en el 46% de las segundas había nicotina, hecho que se pretendería evitar en las playas de la ciudad.

El ayuntamiento recuerda que la ley de control del tabaquismo prohíbe fumar desde hace 10 años en espacios públicos al aire libre donde haya menores durante un tiempo prolongado, como los parques. "Por tanto, unas playas libres de humo van en consonancia con la normativa", concluye. La prueba piloto sería la antesala de una prohibición en todo el litoral de la capital catalana.