La cepa británica del coronavirus comienza a expandirse por todo el mundo y el goteo de nuevos casos no deja de sumar. Hasta el momento son más de 50 países los que han notificado la presencia de la variante, un 70% más contagiosa. En el caso de España, se ha confirmado más de un centenar de positivos.
Así, es necesario conocer qué diferencias presenta esta variante. En concreto, cuenta con un conjunto de 14 mutaciones que han provocado un cambio en la estructura del virus, aunque ello no conlleva un cambio en la sintomatología. Lo que si la diferencian es la velocidad de transmisión y la capacidad de detección. Tan solo hay un tipo de prueba PCR capaz de distinguir la proteína de esta cepa de la del Covid-19 común.
Mayor capacidad de réplica
Los estudios preliminares apuntan que la mayor replicación de esta variante es porque el virus se aloja en la garganta. Con todo, la respuesta inmunitaria es la misma y, por tanto, también los síntomas: fiebre, molestias en la garganta, pérdida de gusto y olfato, dolor corporal y de cabeza y problemas respiratorios.
También el tratamiento debe ser el mismo en caso de resultar positivo. Se debe descansar y adoptar una alimentación nutritiva con abundante líquido.
Junto a la cepa británica, también se han localizado otras en Sudáfrica y Brasil, todas ellas con alta capacidad de transmisión. Esta situación ha generado el temor de la OMS a que las pruebas PCR pierdan eficacia debido a que estas utilizan como diana el gen de una de las espigas del virus.