Pese a la aplicación de medidas dispares para contener el avance del coronavirus, la Comunidad de Madrid y Cataluña se han aproximado en los últimos días en cuanto a impacto se refiere. Mientras que la primera ha encadenado leves subidas día tras día durante la última semana, la segunda mantiene disparada la velocidad de transmisión. Ambas acusan la presión hospitalaria a una semana del inicio de la Navidad.
Este jueves, la Comunidad de Madrid ha informado de 2.471 nuevos contagios, de los que 939 se han notificado en las últimas 24 horas. El dato recoge un ligero incremento frente a los 2.452 casos del miércoles. Asimismo, la incidencia acumulada (IA) es de 262 positivos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días.
En el caso de Cataluña, este jueves se han notificado 2.269 casos, un incremento con respecto a los 2.112 del día anterior. De hecho, la comunidad inició la semana con 902 positivos y ha experimentado crecimientos diarios. Con todo, la incidencia se encuentra ligeramente por debajo de Madrid, hasta los 221 por cada 100.000 habitantes.
Diferentes medidas de contención
La escalada en ambas comunidades se produce pese a que ambas han aplicado medidas de contención diferentes. En el caso de Madrid, el gobierno de Ayuso ha mantenido un relajamiento de las restricciones, con toque de queda entre las 0.00 y las 6.00 horas y apertura de comercios y hostelería. La estrategia se ha centrado por aplicar cribajes entre la población mediante test masivos de antígenos.
Aunque se decretó un cierre perimetral en la Comunidad durante el puente de diciembre, entre el 4 y el 14 de diciembre, y se aplicará otro a partir del día 23, la región ha dejado hacer a la ciudadanía el resto del tiempo.
Cataluña prepara más restricciones
Diferente es el caso de Cataluña, que ha mantenido cerrados la mayor parte del comercio y la hostelería hasta el pasado 23 de noviembre. Pese a un leve descenso en la afectación durante ese tiempo, la comunidad mantiene la velocidad de transmisión del virus descontrolada. Este jueves ha llegado a 1,34, cuando los expertos alertan del riesgo que supone mantener el indicador por encima de 1. Ante esta situación, la consejera de Salud, Alba Vergés, reconoció ayer que serán necesarias nuevas medidas de contención que afectarán al plan de reapertura que se trazó por la Generalitat.
En cuanto al número de muertes, si nos atenemos a los datos publicados por las consejerías de salud de ambas comunidades —con criterios diferentes a los del Ministerio—, Madrid ha registrado este jueves seis fallecimientos, ocho menos que ayer, mientras que Cataluña ha contado 30 decesos.
Aumenta la presión hospitalaria
Otro dato que ronda a la par es el de hospitalizaciones. La Consejería de Salud madrileña cuenta 1.389 personas ingresadas, de las que 300 se encuentran en uci, tres menos que ayer. En Cataluña son 1.532 los enfermos en un centro sanitario, de los que 345 ocupan cama en una uci.
Pese a que el azote del virus es ligeramente superior en Cataluña, si se observa desde el inicio de la pandemia es Madrid la que ha sufrido un mayor impacto. Según la cuarta oleada del estudio de seroprevalencia publicada esta semana, entre el 9,9 y el 13,7% de los catalanes presentan anticuerpos contra el covid, mientras que Madrid, entre el 16,7 y el 20,6% de la población ha contraído el virus.