Marc Ramentol, secretario general de Salud de la Generalitat, ha cerrado por ahora la puerta a ampliar el aforo del Liceu, una posibilidad que queda “a la espera” de la evolución de la pandemia. Ramentol ha señalado que la ampliación de aforo “no ha entrado en vigor” a causa del parón en el plan de desescalada del Govern.
El plan preveía avanzar este lunes a la segunda fase de dicha desescalada, algo que al final no ha ocurrido por el repunte de los indicadores epidemiológicos. Según Ramentol, la “posible solución” en la que trabajaban Cultura e Interior a petición del teatro quedaba condicionada al cambio de tramo y, por tanto, se ha visto afectada.
Contradicción con Interior
El secretario general de Salud ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa acompañado de Jacobo Mendioroz, coordinador de la unidad de seguimiento del Covid, y de Miquel Sàmper, consejero de Interior. Pocas horas antes, Sàmper abría la puerta a permitir que el Liceu tuviera un público de más de 500 asistentes.
En una entrevista en La 2 y Ràdio 4, el consejero ha descrito esta mañana como “increíbles” las prevenciones adoptadas por el teatro porque permiten “una ventilación totalmente garantizada”. Sobre estas medidas, Sàmper ha asegurado: “Pueden hacer que este tope que había de los 500 nos lo podamos replantear”.
Govern descoordinado
En la entrevista previa a la rueda de prensa, Sàmper ha explicado que el Procicat estaba evaluando los aspectos técnicos de la posible ampliación de aforo. Es más, ha llegado a afirmar que “en las siguientes horas o días se podría tomar una decisión”.
La sorpresa ha sido que la decisión ha sido anunciada al cabo de poco tiempo y en su presencia en la rueda de prensa celebrada poco después. El Liceu ya anunciado que de mantenerse estos límites, cancelará las funciones de La Traviata y toda la programación prevista hasta fin de año.