La sección 9 de la Audiencia de Barcelona juzgará la próxima semana a la propietaria de una administración de Barcelona y a su cómplice por haberse apropiado indebidamente de varios décimos y boletos de lotería de un cliente al que pagaron sólo 192 euros cuando el premio que había ganado ascendía a 150.000 euros.
Los hechos sucedieron en 2015 y la propietaria y su yerno serán juzgadas por presunta estafa y receptación y se enfrentan a dos y un año de prisión, respectivamente.
Sólo 192 euros
La víctima de esta presunta estafa se presentó en la administración de lotería para comprobar sus premios. Los pasó primero por un terminal automático que hay en el exterior y recibió un boleto que decía ‘Premio Superior’ y decidió ir hasta la taquilla para comprobar, uno por uno, los décimos y los boletos que tenía.
La propietaria de la administración pasó las participaciones por la máquina y dijo al hombre que tenía un premio de 192 euros, que también había ganado. El boleto del Gordo de la Primitiva, premiado con 150.000 euros, lo escondió y sólo le pagó los casi 200 euros de otro premio. En pocos segundos decidió quedarse el dinero que había ganado uno de sus clientes.
El yerno ingresó el dinero
Con el boleto que tenía un premio de 150.000 euros, la mujer llamó a su yerno, con el fin de dificultar que pudieran seguir el rastro de la estafa. Le encargó, presuntamente, ir al banco a ingresar el dinero. El hombre sabía perfectamente que el boleto había sido robado de un cliente e igualmente, según el fiscal, aceptó ir a cobrarlo. Se presentó en una entidad bancaria y recibió 125.945,18 euros, la suma total del premio después de haberse descontado los impuestos.
Una vez tuvo el dinero, lo ingresó al momento en una cuenta corriente a su nombre, según pudieron saber los Mossos d'Esquadra después de la denuncia de la víctima.
Denuncia en los Mossos
Al cliente le entraron dudas sobre el premio e hizo algunas comprobaciones, hasta que puso el caso en conocimiento de Loterías y Apuestas del Estado. Finalmente presentó una denuncia a los Mossos d'Esquadra. La policía catalana detuvo al cómplice, quien, al aceptar los hechos, ingresó en un número de cuenta propiedad de la víctima el dinero del premio y 1.500 euros como “indemnización”.
La Fiscalía pide que la mujer, la propietaria de la administración, sea condenada como autora de un delito de estafa y que le caigan dos años de cárcel. Igualmente, quieren que durante diez años no pueda ser responsable o trabajar en la venta de lotería estatal. La Fiscalía también pide una multa de casi 2.500 euros. Para el yerno, la Fiscalía pide una pena de un año de prisión por el delito de receptación -vender o cobrar productos que sabes que son robados-. El juicio arrancará el martes, 24 de noviembre, a las diez de la mañana en la sección 9ª de la Audiencia de Barcelona. Está previsto que declaren los dos acusados y también la víctima.