El oso pardo ibérico bautizado como Goiat ha perdido el collar GPS que permitía geolocalizar sus movimientos a través de un satélite. El Departamento de Territorio ha informado de este hecho en un comunicado, en el que señala que no se detectaba ningún movimiento del animal desde hacía 15 días.
Esto significa que Goiat se habría desprendido del GPS el pasado 15 de octubre, aproximadamente. El collar ha sido encontrado en la zona de la Ribagorza aragonesa, hasta donde el personal técnico que cuidaba del animal se desplazó para comprobar si todo iba bien.
Ningún oso localizado en el Pirineo
Tras este incidente, actualmente no queda ningún oso geolocalizable en el Pirineo. Goiat era el último que quedaba bajo control GPS, ya que el Gobierno francés informó hace unas semanas de que la transmisión del dispositivo de las hembras Sorita y Claverina no funciona.
El oso pardo ibérico está considerado como una especie en peligro de extinción. De hecho, a mediados de los años noventa, estuvo a punto de extinguirse en los Pirineos. Durante la segunda mitad de esa década se desarrolló un programa Life, instrumento financiero de la Unión Europea coordinado entre Francia y España, para proteger al oso pardo. Goiat fue liberado por la Generalitat en el marco de este proyecto en 2017, con el objetivo de reintroducir el oso pardo en la zona.