El colegio Puig-Agut de Manlleu (Osona) ha confinado a 8 de sus 23 grupos después del primer cribado masivo escolar realizado en este centro el viernes pasado. Estas clases se sumarán a las otras dos que la escuela mantenía aisladas. Los casos positivos solo representan el 5% del alumnado --15 personas tienen Covid-19, según los tests PCR realizados: 13 alumnos y 2 trabajadores del centro--, pero cada menor forma parte de una clase diferente.
Una tercera clase previamente confinada se reincorporó ayer lunes, por lo que actualmente el 43% del colegio se encuentra en casa, siguiendo las clases de manera telemática. La cuarentena que deberán pasar será de 10 días.
Un resultado "normal"
El Departamento de Educación quiere destacar que estas cifras significan que más de la mitad del centro sigue acudiendo con normalidad al colegio. Que se encuentren positivos en las escuelas e institutos no es una mala noticia, ya que el descubrimiento de estos positivos es un dique de contención contra la expansión del virus, en su opinión.
La consellería apunta que la mayoría de los contagios no se producen dentro de los centros, sino que son un reflejo de lo que pasa a nivel comunitario.
Alto índice de rebrote
Manlleu es el tercer municipio de Cataluña con un índice de rebrote más alto --864,42--, solo superado por Puigcerdà (1.318,13) y Canet de Mar (944,86). De hecho, fue por esta razón por la que la Generalitat escogió realizar el primer cribado escolar en esta localidad, que también acogió un testeo masivo en el centro cívico Frederica Montseny. Ambos espacios se encuentran en el barrio de l'Erm, una de las zonas más vulnerables y con más densidad de población del municipio.
La situación epidemiológica en el resto de la comarca no es mucho mejor. En Osona, el índice de rebrote se sitúa en 424,58 y la velocidad de transmisión (Rt) llega hasta el 1,9 --solo es superada por la Cerdanya (789,25) y el Priorat (512,85)--, lo que ha provocado que un total de 72 centros cuenten con grupos aislados.