El secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, ha presentado un nuevo protocolo de actuación en las residencias de Cataluña que le otorga más poder e independencia a la dirección de cada centro. Un cambio que tiene como objetivo el permitir recibir visitas con más frecuencia a los mayores ingresados.
De este modo, en vez de basarse en el riesgo de rebrote de la zona, cada geriátrico se adaptará a la situación que viva internamente con el coronavirus y pactará, con los propios residentes y sus familiares, qué medidas seguir para la seguridad de sus internos.
El Govern renuncia a la gestión
La primera decisión que han anunciado desde el Govern es el desvincular a las residencias del riesgo de rebrote que se dé en sus respectivas zonas. Tal y como ha asegurado Argimon, las restricciones deben basarse "en el propio centro y en su propia situación", ya que puede ser completamente distinta a lo que se viva a su alrededor.
"Nos centramos más en la residencia que en el entorno territorial donde se encuentra", ha concretado el secretario al respecto. En este sentido, Salud se guiará más por la etiqueta de color que tenga cada centro --verde, naranja y rojo, que dependen del número de casos registrados-- para cumplir su objetivo principal: aumentar las visitas a los mayores.
Quieren facilitar las visitas
"Las visitas estarán autorizadas según el riesgo de contagio del propio centro, y únicamente si están en color verde y naranja, sin casos o contagios aislados --menos de cinco--. Además, solo serán autorizadas a personas sin patologías en las zonas verdes --aisladas y limpias de Covid-19-- del centro", ha detallado el secretario.
"Si no visitamos a nuestros mayores, no morirán por coronavirus pero sí por tristeza. No les hace ningún bien el no recibir visitas de sus seres queridos", ha afirmado Argimon antes de dar rienda suelta a la dirección de cada centro en cuanto al horario de visitas. "Cada residencia es un mundo, y es lógico no determinar una visita a un tiempo establecido", ha declarado.
Cautela con los rebrotes
Desde el Govern recomiendan que cada interno reciba a un máximo de tres personas por visita, para controlar el riesgo de rebrote, aunque permitirá las salidas de los internos del centro en el que residan siempre que sean autónomos y lo pacten entre el residente, la dirección y la familia.
Un permiso que se admitirá tanto en compañía como en solitario, al igual que el pasar unos días fuera de la residencia. Por ello, Argimon ha pedido a los centros que mejoren la entrada segura de internos y visitas, que amplíen y perfeccionen las zonas verdes en los geriátricos, además de prepararse para aplicar los protocolos sanitarios cuando sea necesario.