Los autobuses de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) volverán a ser accesibles por delante desde el lunes, coincidiendo con el inicio del curso escolar, y los conductores volverán a atender a los usuarios, excepto para la venta del billete sencillo, que continuará haciéndose a través del móvil.
TMB informa este sábado en un comunicado de que la semana que viene las redes de transporte público ofrecerán la máxima capacidad y de que el Metro reforzará las líneas 1, 2 y 5 en las horas punta de la mañana y de la tarde.
Con la habilitación de la puerta delantera del bus, el uso de la mascarilla continuará siendo voluntario para los conductores mientras están conduciendo.
Pantallas de protección
Como medida preventiva se han instalado en 1.030 vehículos de la flota, pantallas de protección del sitio del conductor, excepto en los minibuses, donde seguirá usándose la protección con láminas de plástico.
Las separaciones son transparentes, de policarbonato o de vidrio, se adaptan a la forma de la puerta del conductor, al pupitre, a la máquina validadora y al resto de equipamiento de los autobuses e incluyen una ventanilla de comunicación.
Asimismo, el lunes entrará en funcionamiento la nueva línea 141 de autobuses, que unirá los barrios de Sant Antoni y la Izquierda del Eixample con la plaza de Francesc Macià. El servicio, que circulará verticalmente por las calles Villarroel y Calabria, permitirá acceder a equipamientos asistenciales de referencia como el Hospital Clínic, el CUAP de Manso y el Hospital Universitario del Sagrat Cor, los mercados de Sant Antoni y el Ninot, así como otros puntos de interés del distrito, como la piscina Sant Jordi y las bibliotecas públicas.