Rapapolvo de CCOO al plan de la vuelta al cole diseñado por la Generalitat. El sindicato ha denunciado la falta de recursos humanos y materiales en el protocolo “elaborado de forma unilateral” por la Consejería de Educación. “El papel del Govern ha sido decepcionante”, ha resumido el secretario general Javier Pacheco.
“Las familias tienen incertidumbre sobre cómo empezará el curso y los profesionales todavía no tienen claro cómo afrontar la pandemia”, ha declarado el portavoz. Para la organización, la única opción para que las escuelas se mantengan abiertas pasa por una inyección presupuestaria por parte de la administración.
Los grupos burbuja, en el aire
En concreto, CCOO cifra en 2.000 millones el dinero necesario para fijar una ratio de 15 alumnos por aula o 700 millones si se quiere reducir a 20 alumnos. Este desembolso permitiría contratar a más profesorado y garantizaría los grupos burbuja aconsejados por los epidemiólogos.
Sin embargo, el compromiso de Educació se ha quedado muy atrás de las demandas de los trabajadores, lo cual abre la puerta a un escenario complicado en las próximas semanas: "Desgraciadamente, vamos en dirección al cierre general de escuelas", ha afirmado Manel Pulido, secretario general de la federación de educación del sindicato.
El Ministerio se desentiende
Por otro lado, Pulido ha considerado del todo insuficiente los 337 millones transferidos por la administración central a la Generalitat: "Con este dinero podremos mejorar un poco pero no llegaremos a las necesidades que tenemos ahora mismo”. También ha criticado la falta de liderazgo del Ministerio de Educación a la hora de asignar los fondos extra contra la crisis sanitaria a las comunidades autónomas.
Sin una estrategia clara para reforzar las plantillas, CCOO ve casi imposible paliar las sobreratios en los colegios e institutos. Una encuesta realizada por el sindicato entre el personal docente revela que el 30% de centros necesitarían al menos uno o dos profesores adicionales para dimensionar las clases adecuadamente. No solo eso, sino que un 10% de centros necesita más de 20 docentes para organizar los grupos burbuja.
Profesores vulnerables
Otro de los puntos cuestionados por la organización es la falta de protección para los colectivos vulnerables: "Es uno de los puntos que más preocupa y agobia a la comunidad educativa", ha indicado Rosa Maria Villaró, responsable de acción sindical en el sector público.
El sindicato también reclama que se aseguren los equipos de protección individual en todos los equipamientos, que se incorpore un profesional de enfermería en los centros educativos y que se incremente un mínimo del 20% la dotación para la desinfección y limpieza. Por último, Celeste Attias, delegada en el sector privado, ha criticado la exclusión de la educación especial en el plan del Govern.