Mossos d'Esquadra han detenido en Canet d'Adri, Esponellà y Cornellà de Terri a cuatro hombres y una mujer, de entre 44 y 56 años, de nacionalidad española como presuntos autores de delitos contra la salud pública, tráfico de drogas, blanqueo de capitales y tenencia ilícita de armas, tras descubrir 15.000 plantas de marihuana en una finca.
Fue a principios de julio cuando los agentes tuvieron conocimiento de que una finca de Canet d'Adri podría haber una plantación de esta droga. Los mossos iniciaron la investigación y descubrieron el cultivo.
Detenido con una escopeta
Tras identificar a los propietarios de la finca, la policía constató que también figuraban a su nombre otras propiedades en Esponellà y Cornellà del Terri. Terrenos que podrían haber sido adquiridos con los beneficios obtenidos por la venta de droga, ya que los sospechosos no contaban con ingresos declarados que les permitiesen tal desembolso.
Con la correspondiente autorización judicial, los agentes montaron un operativo el 22 de julio para realizar entradas en las tres propiedades.En Canet d'Adri, los investigadores observaron que la plantación ya había sido recolectada pero, aun así, encontraron más de un kilo de marihuana seca. Por este motivo arrestaron un hombre de 49 años y vecino de Salt, como vigilante de la plantación, quien llevaba una arma de fuego tipo escopeta en el momento de su detención.
Propietarios de las explotaciones
En Esponellà los mossos encontraron 2.913 plantas de la misma droga, y allí arrestaron a un hombre de 56 años y vecino de Palafrugell, el cual también disponía también de una arma de fuego y que hacía tareas de vigilancia. Finalmente, en la entrada de Cornellà de Terri los policías detuvieron un hombre y una mujer de 47 y 44 años de edad, propietarios de las explotaciones. Durante la tarde de ese mismo día, los agentes localizaron una quinta persona en relación al caso, que también fue apresada.
Tres de los detenidos, con antecedentes, pasaron este viernes a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Girona, mientras los dos restantes comparecerán ante el magistrado encargado del caso cuando sean requeridos.