La llegada del verano significa viajes por carretera. Este año incluso más que otros, ya que la opción más segura para disfrutar de unas vacaciones pasa por quedarse en territorio español. Con el aumento de desplazamientos también suben las probabilidades de accidentes. Por ello, poner especial atención en la carretera puede evitar incidentes desagradables. La importancia de hacer paradas en trayectos largos y respetar la distancia de seguridad son algunos de los consejos básicos para una conducción segura.
Los accidentes no solo se pueden evitar poniendo atención en la carretera, sino también haciendo preparaciones adecuadas antes de viajar. La verificación del nivel de aceite es esencial, ya que un nivel muy bajo provoca que el sistema del coche pierda eficacia. Así mismo, una comprobación del líquido y el estado de frenos permite saber si hay alguna fuga en el circuito que después puede ser fatal.
Mucha agua, cero alcohol
Las distracciones en la carretera siguen siendo las principales causas de accidentes. Planificar la ruta y programar el navegador antes de arrancar evitan desistes en la carretera. Por el mismo motivo, el ajuste del asiento y de los espejos antes de empezar el viaje puede prevenir un incidente innecesario. Otro aspecto esencial es evitar el consumo de alcohol antes del desplazamiento por carretera. En esta línea, en 2018, el 43,4% de los fallecidos habían tomado alguna sustancia estupefaciente, según la Memoria del Instituto Nacional de Toxicología.
Durante el viaje, especialmente si es un trayecto largo, la importancia de hacer paradas para despejarse, estirar las piernas y beber agua permite retomar la conducción con plena energía. En verano es crucial dejar el vehículo en un lugar cubierto para protegerlo de la exposición a un calor extremo, que puede provocar fallos eléctricos o electrónicos. También es importante aislar el interior protegiendo salpicadero, volante y asientos.
Ser respetuosos en la carretera
La época estival tiene como característica principal el calor, que no es un gran compañero para el conductor. Una temperatura de 35 grados provoca que el viajero reaccione un 20% más lento que un mismo conductor a una temperatura de 25 grados. Por ello, los expertos sostienen que lo mejor es evitar conducir en horas centrales en las que el calor es más elevado.
En la carretera, el conductor debe respetar los límites de velocidad porque su exceso aumenta el riesgo de accidentes y su mortalidad. Los expertos recuerdan que lo importante es llegar al destino, no hacerlo antes; así que también hay que respetar la distancia de seguridad.
El truco para mantener la distancia
El espacio entre coches permite ganar tiempo en caso de un imprevisto. ¿Pero cómo saber si se está manteniendo una distancia adecuada? La regla de los tres segundos consiste en iniciar una cuenta atrás (“tres mil, dos mil, mil”) cuando el coche de delante pasa un objeto fijo. Si se alcanza el objeto antes de terminar el conteo, no se está manteniendo la distancia correcta.
Además, hay que tener en cuenta que todos los usuarios de la carretera son iguales, así que ser respetuosos con todos los vehículos es esencial. Se debe tratar con el mismo cuidado a motoristas, ciclistas, conductores de camión e, incluso, peatones. Sobre todo, hay que tener en cuenta qué usuarios tienen más riesgo en la carretera con respecto a tu vehículo. Por ejemplo, los peatones, ciclistas y motoristas tienen las de perder en un accidente con un turismo.