La operación de los Mossos d'Esquadra contra un clan familiar especializado en delitos violentos se ha saldado con 26 personas detenidas. Durante la mañana del jueves 2 de julio, más de 500 agentes de la policía catalana se han movilizado para llevar a cabo un total de 30 entradas, la mayor parte de ellos en varios municipios de la provincia de Barcelona.
Las actuaciones policiales se han concentrado mayoritariamente en el barrio de La Mina de Sant Adrià de Besòs, donde esta organización criminal familiar tenía su base operativa. En este municipio se han realizado 18 registros; el resto han tenido lugar en domicilios de Badalona, Barcelona, Terrassa, Sabadell, Arenys de Mar (municipios del área metropolitana barcelonesa) y Santa Coloma de Farners (Girona).
"Atemorizaban a la población"
El subinspector del Área Central de los Mossos Jonathan Herrera, ha explicado que los sospechosos se dedicaban a "ejercer el control sobre diferentes familias de la zona y cometer una serie de delitos violentos con los cuales atemorizaban a buena parte de la población". Además de llevar a cabo delitos violentos y contra el patrimonio, también estarían involucrados en dos peleas con armas de fuego en los barrios de La Pau y La Mina ocurridas en los últimos dos meses.
La causa, que dirige el juzgado de instrucción número 4 de Badalona, transcurre bajo secreto de sumario, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). La operación está dirigida por el Área Central de Delitos contra el Patrimonio, de la División de Investigación Criminal.