Las fuerzas y cuerpos de seguridad se han incautado de cerca de cinco millones de falsificaciones, valoradas en más de 143 millones de euros durante 2019. Castilla León, Cataluña y Andalucía son los territorios donde más productos fraudulentos se han intervenido, de las que destacan bebidas y comestibles, seguidos por el sector textil.
Agentes de cuerpos como la Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra o la Policía Foral de Navarra han realizado más de 1.500 investigaciones, que se han saldado con 1.552 personas imputadas o detenidas por delitos contra la propiedad industrial en el conjunto de España.
Alimentación y textil
Según los datos del balance anual que el Ministerio del Interior ha publicado este martes, del total de productos falsificados, cerca de 2,5 millones son del sector de la alimentación, y su valor supera los 33 millones de euros. En cuanto al textil, se han incautado 470.000 piezas fraudulentas, con un coste de mercado similar.
Le siguen la marroquinería y los complementos, con cerca de 87.000 objetos, valorados en más de 31 millones de euros. Desde la cartera que dirige Fernando Grande-Marlaska recuerda que los infracciones a los derechos de propiedad industrial destruyen puestos de trabajo directos al reducir la venta de productos legales y también suponen un riesgo para los consumidores al no estar sometidos a procesos de control.
Falsificaciones en fábricas
Las incautaciones se han producido sobre todo en naves, fábricas y almacenes, donde se se fabrican o distribuyen las falsificaciones --en el 29% de los casos--, también establecimientos de venta --más del 12%-- así como recintos aduaneros de puertos y aeropuertos --4%-- así como puntos de incautación.
Esta actividad, según estudios de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) del pasado año, supone una pérdida de ventas por valor de 6.700 millones de euros anuales en España y más de 53.467 empleos perdidos.