Una vecina del mismo edificio donde este viernes la Guardia Civil ha detenido a un presunto yihadista por su vinculación con Daesh, en la calle Josep Anselm Clavé de Barcelona, ha explicado que no conocía ni recuerda haber coincidido con el detenido, y en este sentido ha reflexionado: "Ya no dedicas tiempo a conocer a tus vecinos como antes".
Así se ha expresado, a pesar de llevar casi dos años viviendo en el lugar. "Ahora ya solo intercambias un hola y adiós pero no interactuas tanto", ha precisado. No es el caso de otra mujer, quien ha detallado que alquilaba una habitación de su vivienda --okupada desde 2017-- al sospechoso yihadista, que compartía con otra mujer y su bebé.
Muchos movimientos
Otros residentes en la zona han explicado que el arrestado "entraba y salía mucho del edificio" durante los últimos días. Unas declaraciones que coinciden con los datos obtenidos por los investigadores, que atribuyen estos movimientos a una "posible búsqueda de objetivos" por parte del ciudadano marroquí.
La Benemérita ha detenido al hombre la mañana de este viernes, en un dispositivo que ha durado unas cuatro horas: los agentes han llegado sobre las 8.00 y se han marchado cuando faltaban unos diez minutos para las 12, con el detenido y toda la documentación encontrada.
Sin conocimiento de su radicalización
Vivía en una habitación en el entresuelo del inmueble --entre Passatge de la Pau y la calle Nou de Sant Francesc-- que había alquilado a una mujer, y ella ha asegurado en declaraciones a la prensa que no tenía ningún conocimiento de la posible radicalización del detenido.
El Instituto Armado ha trasladado al detenido en un furgón hasta Madrid, el caso se encuentra bajo secreto de sumario, y pasará el próximo lunes, 11 de mayo, a disposición del juez de la Audiencia Nacional José Luis Calama, que ha dirigido la investigación.