Los últimos coletazos del temporal Gloria han dejado otro muerto en Cataluña. Este jueves, ha fallecido un pescador que ha caído al agua arrastrado por una ola en Calafat, en L'Ametlla de Mar (Tarragona). Los equipos de rescate han tratado de reanimarlo sin éxito.
Los hechos han tenido lugar sobre las cinco de la tarde en una zona de rocas de Calafat, donde este hombre, de unos 50 años, estaba pescando. En un momento dado, una ola lo ha arrastrado al mar.
Parada cardiorrespiratoria
Han acudido a su rescate la Policía Local, el Servicio de Emergencias Médicas (SEM), Bomberos, el helicóptero de Salvamento Marítimo y el Servicio de Urgencias Municipal (SUM) de L'Ametlla del Mar, que no han podido hacer nada para salvar la vida de este vecino, a pesar de que le han practicado técnicas de reanimación. Ha sufrido una parada cardiorrespiratoria, según han confirmado fuentes del SUM a este medio.
Las mismas fuentes han matizado que el tiempo ha aguantado durante toda la jornada, dado que incluso los barcos de arrastre han salido a faenar, y atribuyen este fallecimiento a la "resaca" de Gloria.
Un desaparecido
En Cataluña, donde el temporal ha afectado con especial virulencia a la zona costera, permanece además desaparecida una persona: el tripulante de un mercante en Palamós (Girona), del que no se sabe nada desde el pasado martes.
Por otra parte, los Mossos d'Esquadra han localizado este jueves el cuerpo sin vida de un hombre a quien se le había perdido el rastro en Cabacés (Tarragona). Estaba en el interior de su vehículo cuando la virulencia del temporal le sorprendió. Y, por la mañana, han hallado a otro conductor desaparecido durante la tormenta en Jorba (Barcelona).
Un sintecho con signos de violencia
A estos dos fallecimientos hay que añadir la muerte de otro hombre en el puerto Palamós el miércoles, cuando un golpe de mar lo tiró al agua en el momento en el que trataba de acceder a una zona restringida para comprobar el estado de su embarcación.
Además, los Mossos d'Esquadra investigan la defunción de un sintecho que apareció con signos de violencia durante las horas más duras del temporal.