Los servicios para el hogal tienen una alta demanda en Cataluña. Por ejemplo, es habitual contactar con un fontanero Barcelona para que ponga fin a una adversidad surgida en el domicilio, relacionada con el agua, como fregadero que no traga o tubería con pérdida.

Otra buena muestra de ello son los cerrajeros, quienes incluso en horarios nocturnos reciben solicitudes para acudir cuanto antes a una vivienda y abrir la puerta en cuestión tras haberse producido la pérdida de las llaves o cualquier otro contratiempo similar.

Precisamente ambos tipos de especialistas le dan mucha importancia a sus maletines profesionales. En ambos casos comparten una serie de características que analizaremos a continuación, profundizando en un tema que no suele ser mencionado habitualmente a pesar de la relevancia que adquiere.

Espaciosos y sin aportar un gran peso extra

Son muchas las ocasiones en las que antes de saber a qué problema han de hacer frente, tanto fontaneros como cerrajeros llevan consigo un maletín inicial con las herramientas habituales, que cubren la mayoría de las incidencias por las que acuden al domicilio.

Así pues, no es de extrañar que necesiten tener en este tipo de conjuntos de almacenamiento una gran cantidad de elementos: destornilladores, tuercas, tacos, arandelas, alicates y un larguísimo etcétera.

Dichos productos, al sumarse, comportan un considerable peso. Por eso se buscan diseños ligeros y pensados para porder llevar el conjunto con una sola mano. En la medida de lo posible siempre se opta por maletines de bajo peso, aunque con un alto nivel de resistencia, aspecto que también detallaremos en próximos párrafos. Por supuesto, se valora mucho el espacio disponible, así como la inclusión de compartimentos específicos.

Gracias a ellos el hallazgo de piezas y materiales en concreto resulta pan comido. En un abrir y cerrar de ojos encuentran justamente lo que necesitan para cada labor.

Asas cómodas para el transporte

Algunas de las labores que desempeñan tanto los cerrajeros como los fontaneros exigen tener ambas manos en un estado óptimo, especialmente las que requieren precisión. Sustituir un bombín estropeado es un ejemplo perfecto.

El asa ha de estar bien diseñada, no ser ni demasiado estrecha ni demasiado ancha. Se cuida especialmente la dureza del material empleado para su fabricación, para evitar que los dedos se resientan, lo que se traduce en una menor efectividad a la hora de realizar sus tareas.

Se trata de evitar lesiones y molestias para conseguir llegar en plenas facultades a la vivienda para ponerse manos a la obra.

Ello es de agradecer en tareas como las que desempeñan los cerrajeros valencia 24 horas. En ocasiones, en plena madrugada se ven obligados a subir por las escaleras hasta la cuarta o quinta planta de un bloque para abrir la puerta de la vivienda. La comodidad de su maletín resulta crucial para que el traslado del material no se convierta en una odisea.

Máxima resistencia

En anteriores líneas se ha mencionado el bajo peso, característica que no está reñida con la elevada resistencia. Así lo demuestran los maletines profesionales que hacen gala de una exquisita relación calidad-precio.

Conforme la tecnología ha ido avanzando, los fabricantes han sido capaces de dar forma a materiales que aguantan perfectamente el paso del tiempo y que aportan poco peso al conjunto.

Segunda mano, una buena opción para empezar

Arrancar un negocio de fontanería o cerrajería no es fácil. Se requiere una inversión inicial de considerable cuantía. Por supuesto, el material forma parte del gasto a efectuar, incluyendo el maletín profesional que, en caso de quererlo de calidad, exige un desembolso nada despreciable.

Pero, ¿y si se opta por el mercado de la segunda mano? Gracias al auge de las aplicaciones móviles, hoy en día es fácil y rápido encontrar un modelo usado que se adapte a las necesidades del especialista en cuestión. Generalmente son unidades que se venden por cese de actividad o por dar el paso a un modelo de superior capacidad.

El ahorro puede ser notable, tratándose de una muy buena opción para aquellos profesionales que pretenden dar comienzo a su actividad no solo en Cataluña, sino también en el resto de España. Gracias a ello pueden ofrecer unos precios más asequibles para atraer a una mayor cantidad de clientes potenciales y ganar confianza inicial como nuevo negocio.

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