El Síndic de Greuges (equivalente al defensor del pueblo en Cataluña), Rafael Ribó, asegura que los problemas de la sanidad pública catalana, o parte de ellos, se deben a la gente que llega de otras comunidades de España para intervenirse. Así lo ha afirmado en el programa Aquí, amb Josep Cuní (SER) a las preguntas sobre las largas listas de espera en la región.
Según Ribó, la sanidad pública de Cataluña es "excelente", como prueba, en sus palabras, que muchos ciudadanos del resto de España elijan los centros catalanes para pasar por el quirófano. Ello, según él, es "uno de los déficits" del sistema, porque genera un "sobrecoste". De este modo, ha escurrido el bulto con la cuestión de las listas de espera, aunque ha reconocido que "hay un problema", si bien ha indicado que se pone el foco en el lugar equivocado.
Líderes en listas de espera
En la entrevista, ha añadido que hay que mimar el sistema sanitario público de Cataluña o se irá "a hacer puñetas". Ha reconocido la labor de los profesionales, "que están poniendo lo mejor de ellos, seguramente con un salario inferior al que tendrían que cobrar", y ha asumido que "falta inversión en maquinaria". "La salud es carísima, los descubrimientos van a una velocidad más rápida que las partidas presupuestarias", ha explicado.
Rafael Ribó / TWITTER
Según los últimos datos disponibles, Cataluña tiene a 168.108 pacientes en lista de espera para operarse, el mayor número desde hace siete años. La autonomía lidera la clasificación del número de enfermos que aguardan una intervención por cada mil habitantes, con una ratio de 23,32, por delante de Extremadura (21,01) y Castilla-La Mancha (19,07).
Globalmente, el tiempo medio de espera para pasar por quirófano era de 146 días, según datos del Sistema Nacional de Salud (SNS). De nuevo, la región queda en mal lugar cuando se compara este dato con el del resto de comunidades autónomas. Solo en Andalucía (164) y Castilla-La Mancha (149) esperan más los pacientes para someterse a una intervención en un hospital público.