Un hombre mató a su amante embarazada en 1981 en Barcelona y el juez le procesa 38 años después tras analizar las pruebas obtenidas y atar cabos.
El Juzgado de Instrucción 4 de Manresa (Barcelona) ha procesado a un hombre de 74 años, M. M. T., sospechoso de acabar con la vida de una mujer de 24 años embarazada de seis meses –él entonces tenía 36 años– en Sant Salvador de Guardiola (Barcelona) y ocultar el cadáver en una finca.
Desde 1981
El magistrado procesa al sospechoso por presuntos delitos de homicidio y aborto y le impone una fianza de 150.000 euros por eventual responsabilidad civil, aunque ya ha recurrido ante la Audiencia de Barcelona.
Todo se remonta a la primavera del 1981, cuando el procesado –que estaba casado y tenía tres hijos con los que vivía en Móstoles, Madrid– y la muchacha se conocieron y comenzaron una relación a escondidas. Fruto de estos encuentros, ella quedó embarazada enseguida.
Nadie denunció la desaparición
En octubre de ese mismo año, ambos se desplazaron hasta una parcela de la urbanización de Sant Salvador –él le contó a su mujer que había viajado a Barcelona para encontrar casa y trabajo y comenzar una vida nueva en Cataluña–, donde ella le contó que estaba embarazada de unos seis meses. El juez cree que el sospechoso la mató disparándole en la cabeza por "la tensión provocada" al conocer el embarazo.
Tras ello, el sospechoso habría enterrado el cadáver en el jardín de la casa de Sant Salvador, en la que unas semanas después (noviembre de 1981) se instaló con su familia durante ocho meses, después de los cuales inició "una vida nómada con el fin de evitar su localización en caso de ser relacionado con la desaparición". Nadie denunció entonces la ausencia de la joven.
Les presentó la hermana de la fallecida
Sin embargo, pasaron los años y no fue hasta el 8 de enero de 1999 cuando la Guardia Civil comenzó a investigar tras el hallazgo "de los restos óseos de una persona de sexo femenino sin identificar, e igualmente restos cadavéricos de un feto". Pero el caso quedó en el fondo del cajón hasta el 2017, cuando la hermana de la víctima denunció la desaparición, la Policía Nacional recogió muestras biológicas y "saltó la coincidencia" con los restos hallados.
Además, en una investigación posterior, la Guardia Civil "determinó, a través del perfil genético del investigado M. M. T. su relación paterno filial con el feto hallado en el jardín del chalet" de Sant Salvador. El juez detalla que el sospechoso es un hombre nacido en 1945 en Halle-Saale (Alemania), que se dedicaba a la traducción y que la hermana de la víctima fue quien les presentó en 1981.