Tanto por cultura como por horas de sol, las persianas son muy utilizadas en nuestro país. Por este motivo, siempre es necesario tener unas de calidad o repararlas en el caso de que estén estropeadas.
Antes o después, cualquier elemento con movimiento acaba funcionar mal o se ven mal estéticamente por desgaste. Todo ello hace necesario contar con una buena empresa profesional que se encargue de arreglar persianas o instalar unas nuevas.
Por tanto, hay que buscar una empresa que haga su trabajo de forma profesional y donde la experiencia les permita afrontar el arreglo o instalación de la manera más eficiente. Contar con elementos nuevos y renovados, hace que podamos sentirnos con mayor seguridad y privacidad en nuestro hogar.
Las persianas y las ventanas
El paso del tiempo hace que sean necesarios diferentes arreglos en casa, que en muchos casos no se pueden dilatar ni espaciar en el tiempo. Evidentemente, no es lo mismo que la persiana no funcione bien si da a un patio interior y no se utiliza que si es una persiana exterior y tiene una orientación con mucha incidencia del sol. Como nos comentan en Persianistas Valencia, son situaciones en las que hay que actuar sí o sí.
La gran variedad de productos que existe actualmente hace difícil escoger el más apropiado. Por eso es recomendable pedir asesoramiento sobre qué tipo de persiana es la que más puede convenirte.
Los profesionales hacen trabajos de todo tipo, desde modificaciones a cambios totales de motores a reducido coste, de tal manera que se pueda abordar el arreglo de las que no funcionen bien.
Un objeto práctico que proporciona privacidad
Además de para protegernos del sol, la persiana también nos da la privacidad necesaria en el hogar u oficina. De igual manera, si bien las hay muy baratas, instalar unas de buena calidad hacen que ahorremos dinero a corto y largo plazo. Si cumplen bien su función bajará nuestra factura de la luz, al no usar tanto el aire acondicionado. Y unos elementos de calidad siempre son más duraderos.
El coste de arreglar persiana
Las reparaciones de persianas son bastante comunes, por lo que es posible que los clientes se interesan por cuánto tendrán que pagar. Todo depende del tamaño y el tipo de incidencia. Las más comunes son
- Arreglar una persiana descolgada.
- Cómo arreglar persiana que no sube o está atascada.
- Arreglar una persiana caída
- Cambiar la cinta de la caja exterior
- Cambiar el recogedor de la persiana
Estamos ante un sector muy diverso. El mercado de persianas abarca muchas tipologías, como las eléctricas motorizadas, las alicantinas, venecianas o verticales, entre otras.
Un poco de historia
Las persianas han pasado a ser fundamentales en nuestros hogares, no solo por razones estéticas, también por su funcionalidad. Pero son un elemento que no siempre existió.
Antes de su nacimiento en el siglo XVII, esa función la realizaban las contraventanas, dos puertas fabricadas en madera instaladas sobre las ventanas. El invento nació en Persia (actual Irán), pero después se exportó a otros lugares del planeta.
El origen de su nombre viene del francés “persienne”, cuyo significado es “de Persia”.
El siglo XVIII supone su extensión por continente europeo. Inicialmente eran varios listones juntos que podían desplegarse o recogerse por encima de las ventanas con la ayuda de unos cordeles.
A finales de aquel siglo en Italia, en la ciudad de Venecia, nace el modelo veneciano. La novedad estaba en las láminas horizontales, que se regulan en inclinación para el control de la entrada de la luz. El inglés Edward Bevan perfeccionó este sistema sustituyendo los cordeles por un cordón sin fin e introduciendo una polea para mover las láminas.
En Estados Unidos a finales el siglo XIX empezaron a usarse nuevos materiales como el cristal, a los que se unieron las de metal y fibra a lo largo del XX.
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