Los padres de Nadia, la niña con una enfermedad rara a la que sus padres utilizaron para lucrarse de los fondos obtenidos gracias a diversas campañas para, supuestamente, curarla, deberán devolver a 65 perjudicados un total de 62.284 euros, de los más de 400.000 en los que se evaluó la estafa.

La Audiencia de Lleida ha emitido una nueva sentencia en la que se especifica la cantidad que sus progenitores, Fernando Blanco y Margarita Garau, tienen que devolver de los 402.232,65 euros totales que la sentencia anterior establecía como importe total de la estafa.

La Sala responde así a la petición del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), que en mayo pidió anular la parte de la sentencia anterior que hacía referencia a las indemnizaciones “por falta de concreción”.

Donaciones acreditadas

Según se desprende de la nueva sentencia, los padres de Nadia deberán abonar el dinero a todas aquellas personas que en su momento pudieron acreditar los ingresos que habían efectuado con el fin de recaudar fondos para la asociación creada para curar a la niña.

Entre los beneficiarios de estas devoluciones figuran personas particulares, colegios, grupos de teatro y otras entidades que, en su momento, colaboraron con la causa.

Los padres, en libertad

Blanco y Garau fueron condenados a cinco y tres años y medio de prisión, respectivamente, después de que el tribunal considerara que eran autores de un delito continuado de estafa agravado. 

Sin embargo, ambos están en libertad a la espera de que se resuelvan los recursos presentados por los abogados.