Los cuerpos de seguridad ya se mueven para atajar la crisis de inseguridad en Barcelona. Mossos d’Esquadra y Policía Nacional llevan a cabo una actuación conjunta contra los carteristas reincidentes. Asimismo, se ha desplegado la unidad contra la inmigración ilegal con competencias para la aplicación de la ley de extranjería.
El dispositivo se ha desplegado a partir de las 13:00 horas de este martes en las principales estaciones turísticas del metro de Barcelona. Se han movilizado 50 agentes de los Mossos de las unidades de seguridad ciudadana, transporte y antidisturbios, así como una treintena de agentes de la Unidad Contra Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) de la Policía Nacional.
Agentes de paisano y uniformados
Además, el dispositivo cuenta con la cooperación y colaboración del Centro de Seguridad y Protección Civil de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) en el metro. La finalidad es prevenir los hurtos y robos violentos.
En las estaciones de metro se han colocado agentes tanto de paisano como uniformados de ambos cuerpos con el objetivo de localizar a los cacos ‘in fraganti’ o buscando personas a las que robar.
Movilización vecinal
El operativo tiene lugar después de que los robos violentos hayan repuntado un 30% en Barcelona en lo que va de año, según datos de los Mossos. El conseller de Interior, Miquel Buch, pedía el lunes un endurecimiento del código penal para alejar a los carteristas de los puntos más propensos a robos.
Ante la grieta en la seguridad de Barcelona, una treintena de asociaciones y entidades vecinales han convocado una marcha el próximo 3 de septiembre. La organización, Tsunami Vecinal, pide a los vecinos que salgan a la calle "por el civismo y la seguridad en nuestra ciudad".