Los Juegos Olímpicos del año 1992 supusieron un antes y un después para Barcelona. El antes de una ciudad con ambición de transformarse para ser un referente cosmopolita europeo. El después de una urbe que se ha convertido en uno de los destinos turísticos más importantes del mundo.
Durante el 2018 más de 13 millones de turistas visitaron la ciudad de Barcelona. Lo hicieron atraídos por sus innumerables encantos, con la Sagrada Familia y el arte de Antoni Gaudí a la cabeza del reclamo turístico. Pero la ciudad condal es más que la basílica y el estilo modernista de su artista más célebre. Ciencia, chocolate, inventos, innovación y todos los tipos de expresión artística y cultural, son los protagonistas los museos imprescindibles para conocer en Barcelona.
Museo Picasso
Pablo Picasso, uno de los mayores exponentes del cubismo, nació en Málaga pero Barcelona se convirtió en su segundo hogar. En ella pasó largos periodos de su vida y por eso la Ciudad Condal acoge un museo dedicado a él y a su obra.
El Museo Picasso, afincado en un edificio gótico en el barrio del Born, alberga una colección permanente de 4.000 obras correspondientes a los años de juventud del pintor malagueño. Junto a ellas el museo organiza una programación anual de exposiciones temporales.
Museo del Chocolate
El Gremio de Pastelería de Barcelona es el responsable de este museo dedicado al chocolate. Afincado en el antiguo convento de San Agustín de la Calle del Comercio, el espacio presenta un recorrido por los orígenes del chocolate, su llegada a Europa y la expansión de su consumo.
Los responsables de este centro cultural que forma parte de los museos imprescindibles para conocer en Barcelona, aseguran que tiene la voluntad de innovar y modernizar el sector a partir de la tradición para desarrollar un proyecto cultural singular que sirva para divulgar la historia de la pastelería y la chocolatería de calidad.
Museo Nacional de Arte de Cataluña
El Palacio Nacional, un obra de arte en sí mismo, alberga el Museo Nacional de Arte de Cataluña. El edificio se construyó con motivo de la Exposición Internacional de 1929 y está coronado con una gran cúpula inspirada en la de San Pedro del Vaticano.
Más allá de la belleza exterior de su emplazamiento, el Museo Nacional de Arte de Cataluña acoge una de las colecciones de arte románico más grandes del mundo. Autores como El Greco, Zurbarán, Dalí, Picasso o Velázquez firman algunas de las obras que allí se pueden ver, junto a pinturas, esculturas, fotografías y grabados que recorren la historia y la esencia del arte catalán.
Fundación Joan Miró
Junto al Palacio Nacional está el Edificio de Sert, la obra arquitectónica del íntimo amigo del artista Joan Miró, Josep Lluís Sert, que da cabida a la Fundación Joan Miró, uno de los museos imprescindibles para conocer en Barcelona.
217 pinturas, 178 esculturas, 9 tapices, 4 cerámicas, 8.000 dibujos y la obra gráfica casi al completo del artista catalán Joan Miró, conforman la colección del museo. La mayoría de ellas fueron donadas por el propio Miró, otras proceden de la colección personal de la que fuera su mujer, Pilar Juncosa, y el resto se han ido incorporando gracias a las donaciones de amigos.
Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona
La Plaza de los Ángeles de Barcelona acoge el Museo de Arte Contemporáneo de la ciudad (MACBA). Las obras que conforman el fondo de la colección del museo van desde la abstracción de los años 50 del pasado siglo, hasta el pop europeo, pasando por las vanguardias de los 60 y 70, la figuración fotográfica y la escultura antiminimalista de los 80.
Es un museo con aire internacional, puesto que las piezas que en él se pueden ver están firmadas por artistas locales, de América del Sur, de los países del Este europeo, de norteafricanos, de Oriente Medio y del mundo árabe en general.
Casa Museo Gaudí
En el año 1962 abría sus puertas al público la Casa Museo Gaudí, la que fuese la residencia del arquitecto catalán entre 1906 y 1925. El edificio fue construido como muestra del proyecto urbanístico pensado para el Park Güell de Barcelona.
La casa ha sido acondicionada para mostrar la vida y la obra del arquitecto, por eso en sus estancias se pueden ver muebles y elementos decorativos diseñados por el propio Gaudí, además de documentos que atestiguan la vida del artista. Es, sin lugar a dudas, uno de los museos imprescindibles para conocer en Barcelona.