Prisión preventiva para los tres jóvenes –dos de Salou y el tercero vecino de Cambrils (Tarragona)– acusados de violar a una muchacha de 23 años en la verbena de Sant Joan. La mujer fue a casa de uno de los presuntos agresores tras acabar de pinchar discos y allí, tras una conversación banal que duró poco rato, empezaron a besarla y manosearla contra su voluntad.
La víctima, tras entrar en estado de shock, empezó a pedirle a los jóvenes que la dejaran en paz y que le dolía y, al poco tiempo, se añadió el tercer joven acusado de la violación grupal. Dos de los acusados se marcharon ante las súplicas de la víctima, pero el tercero se quedó obligándola a que estuviera con él un rato más, según publica el Diari de Tarragona.
Salvada por una amiga
Una de las amigas de la víctima entró en la habitación poco después, allí se encontró al supuesto agresor y a su amiga en la cama sin ropa. Ella le pidió auxilio al verla en la puerta y la amiga logró que la víctima saliera del dormitorio, todavía en estado de shock, y a pesar de la resistencia del tercer acusado, el que había entrado último, que no quería que se marchara.
Luego vendría la denuncia a Mossos d’Esquadra, la revisión médica y la detención de los acusados, que tras declarar el día 27 en el juzgado de guardia fueron enviados al Centro Penitenciario de Mas d'Enric –en El Catllar (Tarragona)– de forma provisional y sin fianza. El magistrado, escuchando la versión de las partes, estudiando el atestado decidió que los tres acusados debían ingresar en prisión hasta que el Juzgado que instruyera la causa lo decidiera.