Ya hay más de 6.500 hectáreas afectadas y las llamas continúan descontroladas en el incendio de la Ribera d'Ebre (Tarragona). Así lo ha reconocido el consejero de Interior, Miquel Buch, en una comparecencia conjunta con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, desde la zona del desastre.
Los trabajos para sofocar el primer tramo del flanco derecho del sector 1 del incendio van "por el buen camino" y empiezan a verse resultados positivos, ha explicado Buch desde Vinebre, donde está ubicado el centro del mando operativo.
"Se cumplen la expectativas"
En el segundo tramo, la población se encuentra confinada de manera preventiva en el municipio de Bovera. Aunque Buch ha expresado que en esta parte las llamas "están lejos", lo cierto es que los bomberos todavía no controlan el fuego.
A pesar de todo, su estrategia está funcionando. Confían en atacar el segundo sector del flanco derecho en pocas horas y preparar una nueva ofensiva de cara a la noche, cuando baje el calor. "Se cumplen las expectativas" de las previsiones de avance del fuego, ha dicho el conseller.
Evitar riesgos
Los accesos a los macizos de Montserrat, Les Gavarres y Les Cadiretes continúan cerrados por riesgo de incendio y para que, en caso de que se produzca, no haya ninguna persona en el bosque que obstaculice las tareas de extinción por parte de los especialistas.
Buch ha subrayado la "confianza absoluta" en el cuerpo de bomberos que lidera el ataque junto a otros cuerpos de emergencia, como la UME (Unidad Militar de Emergencia, del Ejército).
La ganadería damnificada
Por ahora, el incendio ha causado la muerte de 200 ovejas de una explotación ganadera, según la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación.
Jordà también ha dicho que la próxima semana se reunirá con alcaldes de la comarca para valorar los cultivos afectados y ofrecer la ayuda del departamento.
La campaña de la siega
La consejera ha recordado que el viernes se prevé una nueva ola de calor y ha defendido la medida preventiva de suspender la campaña de la siega en toda Cataluña las próximas 48 horas. "Todas las previsones son pocas", ha insistido.
Desde la campaña específica de la siega de 2012, los agricultores han ido tomando medidas que han reducido hasta en un 80% los incendios ligados a la actividad agrícola.