Empuriabrava es uno de los enclaves más curiosos que se pueden encontrar en la Costa Brava de Girona. Situado en el reconocido Golfo de Roses y rodeado por el Parque Natural de Aiguamolls de l'Empordà, esta urbanización dentro del término municipal del Ayuntamiento de Castelló d’Empúries fue construida 1967 y se ha ganado el sobrenombre de la Venecia de de la Costa Brava.
Es la marina residencial más grande de Europa, con casi 24 kilómetros de canales navegables y un inmenso puerto deportivo. Allí residen cerca de 4.000 personas y se ha convertido en destino turístico por lo llamativa que es su construcción.
De pantanos a canales
La localización de Empuriabrava, construida en una zona pantanosa, se ha ganado un hueco destacado en el llamativo turístico de la Costa Brava. Sólo las primeras líneas de playa tienen contacto con el mar, pero hay pocas casas que no estén conectadas directamente con él. Como si de las mismas calles se tratasen, los canales llegan hasta el patio trasero de cualquier vivienda, donde se encuentran desde los barcos más modestos hasta embarcaciones de gran lujo.
El modelo que seguido para la construcción de este complejo era el de la marina residencial de alto nivel inspirada en otros casos de similares características que se habían realizado en Florida. Todos ellos, eso sí, emulaban siempre el estilo veneciano clásico.
La historia de Empuriabrava
El proyecto de Empuriabrava comenzó a gestarse entre los propietarios de las tierras donde se cultivaba arroz, en la zona costera. En 1964 se realizaron los primeros intentos urbanizables, aunque no fue hasta el año siguiente, en 1965, cuando se presentó ante el ayuntamiento el proyecto urbanístico. En 1967, pese a las críticas recibidas por parte del sector agrario de la zona, comenzaron a construirse los primeros canales y viviendas.
Empuriabrava desde el aire / JAPLEENPASRICHA - WIKIMEDIA COMMONS
Empuriabrava, pese a ser un complejo bastante reconocido, no es la única urbanización de estas características en Europa. En la misma costa del Mediterráneo pero en territorio francés, Grimaud sigue un modelo similar desde su construcción a principios de la década de los 60. Sin embargo, en comparación con esta, Empuriabrava tuvo un mayor éxito no sólo dentro del mercado inmobiliario nacional, sino en otros países europeos como fue el caso de Alemania. La buena acogida hizo que se proyectase una ampliación del complejo para 1975, pero las corrientes ecológicas de aquella época junto con la crisis mundial frenaron el proyecto. Finalmente, la Generalitat protegió los pantanos con la creación del Parque Natural de Aiguamolls de l'Empordà, en 1983, y Empuriabrava pasó a formar parte de Castelló d'Empúries.
¿Qué hacer en Empuriabrava?
Empuriabrava, al ser una urbanización creada hace poco más de 50 años, no cuenta con una historia detrás que permita visitar edificios emblemáticos. Pasear por sus calles y canales es todo lo que puede ofrecer de cara al turismo. Sin embargo, se ha convertido en un sitio de referencia para aquellas personas que buscan vivir el deporte de aventura, con distintos lugares para hacer salto en paracaídas o la posibilidad de alquilar alguna embarcación para uso recreativo.
Los canales de Empuriabrava / DANIEL CULSAN - WIKIMEDIA COMMONS
En lo que a los alrededores se refiere, lo mejor es acudir al pueblo principal, Castelló d'Empúries, un referente dentro de la arquitectura de la Edad Media, sobre todo en el estilo gótico con la Iglesia de Santa María como el gran referente. Por otro lado, el Parque Natural de Aiguamolls de l'Empordà es la escapada perfecta para los amantes de la naturaleza, siendo la segunda zona húmeda más importante de Cataluña sólo por detrás del delta del Ebro. La entrada es totalmente gratuita y se pueden realizar rutas de senderismo, en bicicleta, a caballo o en kayak.