La Audiencia de Barcelona mantiene en libertad hasta mañana a Joaquín Benítez, a la espera de tomar una decisión sobre si el pederasta debe ingresar en prisión. Los abogados han explicado a RAC1 que los jueces no han podido decretar nada por problemas de agenda. 

El exprofesor de gimnasia está condenado a 21 años de cárcel por cuatro delitos de abusos sexuales, pero lleva en libertad provisional desde febrero de 2016. El objetivo de la vista debía decidir si el condenado, aunque sin sentencia firme, debía ingresar en la cárcel tal y como piden las acusaciones particular y popular citadas. 

Confeso

El pederasta confesó sus abusos ante el juez de instrucción, que lo mantuvo en libertad condicional con la prohibición de desarrollar actividades que involucrasen a menores. La decisión fue avalada después por la Audiencia de Barcelona, que consideró que no existía riesgo de fuga porque había comparecido todas las veces que se le había requerido.

Tanto la Fiscalía como las acusaciones creen que la situación ha cambiado, dada la elevada condena que se le ha impuesto a Benítez. Además de los 21 años de cárcel, la Audiencia condenó al profesor a pagar 120.000 euros como indemnización a las cuatro víctimas. Asimsimo, consideró que la Fundación Champagnat –propietaria del colegio– era responsable civil subsidiaria y tendrá que abonar la diferencia que el pederasta confeso no pueda afrontar.