Un incendio en la calle Riera Blanca de l'Hospitalet de Llobregat ha dejado tres muertos –una madre y sus dos hijos pequeños–. El de menor edad –un bebé de pocos meses– ha fallecido en el hospital de Sant Joan de Déu, donde había sido trasladado en estado crítico máximo tras haberle practicado maniobras de reanimación. Los bomberos han informado desde su canal de Twitter que el incendio ha sido totalmente extinguido, aunque la vivienda ha quedado gravemente afectada.
Siete dotaciones de los bomberos han trabajado sin descanso para apagar las llamas lo más rápido posible. También se han desplazado unidades del Servicio de Emergencias Médicas –con una unidad pediátrica– así como patrullas de los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana. La policía catalana se hará cargo de la investigación y procederá a la inspección ocular del inmueble cuando el acceso se haya asegurado.
Causa desconocida
Además de las dos víctimas mortales y el niño en estado crítico, hay otras dos personas que están siendo atendidas por inhalación de humo. Todavía se desconocen las causas que han provocado el inicio del fuego, que se desarrolló en la cuarta planta del edificio.
La consejera de Salud, Alba Vergés, ha sido la primera autoridad en pronunciarse sobre el incidente. La miembro del ejecutivo catalán se siente "golpeada por las consecuencias del incendio en l'Hospitalet". La alcaldesa de la ciudad, Núria Marín, también ha lamentado el suceso y ha asegurado que "trabajadores municipales están atendiendo a los vecinos del edificio para cubrir sus necesidades". Marín apunta al sobrecalentamiento de una estufa como origen del mortal incidente.