El Govern, obligado a dar explicaciones por la propaganda sanitaria

El Govern se verá obligado a dar explicaciones sobre su campaña de propaganda sanitaria. El PSC ha presentado una batería de preguntas en el Parlamento catalán sobre la iniciativa cap al CAP, que pretende vender los ambulatorios de la autonomía sin reforzar su personal o recursos.

Tres semanas después de que la consejera catalana de Salud, Alba Vergés (ERC), presentara la campaña propagandística en Barcelona, la oposición ha pedido más datos. La diputada del PSC y portavoz socialista en la Comisión de Salud del Parlamento catalán, Assumpta Escarp, ha presentado nueve preguntas a la Mesa que deberán ser respondidas por escrito. Pide saber la electa socialista qué coste ha tenido para el departamento que comanda Vergés la campaña, además del objetivo de la misma.

"¿Se ha informado a los profesionales?"

Asimismo, Escarp exige conocer si "el Departamento de Salud informó a los profesionales de la campaña antes de hacerla pública". Si la Consejería que dirigen los republicanos no dieron parte a los médicos, la diputada quiere también saber el porqué. Pide asimismo explicaciones el PSC sobre la posición de los profesionales sanitarios respecto a la iniciativa, que apenas ha tenido recorrido en las redes sociales salvo por la difusión que han hecho consejeros y cargos de ERC. "¿Cuenta con el apoyo de estos profesionales?", inquiere la electa.

En el mismo sentido, la parlamentaria del PSC quiere que Salud explique si informó a los profesionales sanitarios de los "objetivos" de la iniciativa y, quizá más importante, "si el Govern incentiva a la ciudadanía a acudir a los CAP, ¿tiene previsto el Ejecutivo reforzar las plantillas --o destinar recurso adicionales-- de los centros atención primaria ante la posible carga de trabajo y visitas que pueda generar?". Por último, los socialistas exigen que se divulguen "qué medidas está llevando a cabo el Govern para acabar con la congestión" en los ambulatorios.

Piden la retirada de la campaña

La reacción de la oposición al Gobierno que lidera Quim Torra en Cataluña llega después de que la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (CAMFiC) y la Asociación de Enfermería Familiar (AIFiCC) pidieran la retirada de la campaña porque conlleva el peligro de generar "una medicalización inadecuada y una dependencia innecesaria de los servicios sanitarios". En una recogida de firmas [ver aquí] de médicos y enfermeros, ambas asociaciones alertaron de que los pacientes catalanes acuden una media de ocho veces al año a su ambulatorio, una cifra superior a la de países como Francia o Portugal. Ello provoca que si Salud quiere dirigir a más enfermos a estos equipamientos se incurra en el riesgo de "saturar y crear más listas de espera" en los equipamientos.

Por su parte, fuentes sindicales y CCOO lamentaron que el Govern "no haya reforzado" este nivel asistencial como prometió y que la campaña se haya lanzado a mes y medio de que empiece el ciclo electoral en España con las elecciones generales.