Ada Colau y Quim Torra ya tienen sobre la mesa las peticiones de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) para retirar y luchar, de manera efectiva, contra las toneladas de amianto existentes en todo el territorio catalán.

Erradicar este peligroso material potencialmente cancerígeno, de forma segura y por personal especializado, debería ser, según explican en un comunicado, una prioridad para las administraciones. Por esta razón, les reclaman rapidez para cumplir las resoluciones adoptadas por el Parlamento Europeo, que fija el año 2028 como fecha límite para la eliminación total del amianto de los espacios públicos y de afluencia pública. Lo cual incluye instalaciones como escuelas, polideportivos, hospitales, mercados, parkings, talleres y canalizaciones de agua, entre otros.



Entre las principales peticiones de la FAVB se encuentran las siguientes:

  • Tener un protocolo que valide la solvencia técnica de las personas que llevan a cabo las Inspecciones y Evaluaciones de Amianto (IAA).
  • Elaborar un Censo de Edificios con Riesgo de Amianto (CERA), y planificar la actuación sobre ellos.
  • Contar con un protocolo que valide la solvencia técnica de la empresa que ejecute las actuaciones definidas, y en base a los requisitos legales.
  • Crear un certificado del solar, edificio o lugar de trabajo libre de amianto, como existen en Suiza y Francia.
  • La eliminación inmediata del asbesto de todas las instalaciones y edificios públicos.
  • Disponer de “marcadores creíbles” de contaminación ambiental en aquellos edificios donde se llevan a cabo trabajos de extracción de amianto.
  • Endurecer la normativa española, que consideran “muy laxa”.
  • Prever un régimen sancionador, habilitar subvenciones de los trabajos y establecer medidas de reparación para las personas afectadas por las consencuencias de la sustancia tóxica.

El mercado de la Abacería del barrio barcelonés de Gràcia, una instalación en obras en fase desamiantado / Jordiferrer

El mercado de la Abacería del barrio barcelonés de Gràcia, una instalación en obras en fase desamiantado / Jordiferrer

Material omnipresente

La FAVB pide que se aborde de forma urgente la elaboración de un mapa del amianto en Cataluña, y un plan de "desamiantado" por etapas. Según exponen en sus misivas, en Cataluña se importaron durante décadas centenares de toneladas de este material, que se empleó en más de 3.000 productos, en el 95% de los casos en la construcción, sobre todo en forma de fibrocemento. Pero también en pinturas, losetas y otros materiales que entraron a formar parte de paredes y falsos techos, y que fue utilizado para recubrir estructuras metálicas.



En este sentido, explican que aún quedan "millones de toneladas, principalmente de fibrocemento", instaladas por toda Cataluña, "visible y oculto". Y señalan que existen centenares de escuelas públicas con amianto "en alguna o diversas de sus aplicaciones", o bien en mercados, "algunos de renombre internacional y de gran afluencia turística". "También hay centenares de edificios privados que tienen. Algunos son naves industriales, y muchos son viviendas y edificios de oficinas”, explica la carta, que denuncia que en Cataluña no exista ningún laboratorio homologado para medir y contar las fibras cortas y finas de amianto, lo que se conoce como microscopia electrónica.

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Restos de uralita en el Turó de la Rovira

Evitar enfermedades y "una situación inmanejable"

La FAVB recuerda el peligro de la caducidad de este tipo de materiales, que con el tiempo resultan nocivos por su rotura, erosión o desgaste: “Todo este amianto, debido principalmente al tiempo transcurrido desde que se instaló, y sometido como está a factores agresivos mecánicos y físicos, desprende fibras cancerígenas a causa de la degradación superficial", avisan.  "Esta circunstancia representa no solo un peligro para los residentes y trabajadores. También supone una contaminación ambiental muy peligrosa”, añade la carta al Ayuntamiento, que advierte que si las tareas de desamiantado no empiezan a realizarse ya, “al final nos encontraremos con una situación inmanejable”. Por ello, instan a las administraciones a elaborar de forma urgente un inventario de instalaciones con amianto.

Las asociaciones vecinales recuerdan en sus cartas a Colau y Torra que un informe del Parlamento Europeo publicado en 2013 reconoce diversas enfermedades producidas por el amianto: “Muchas son originadas por fibras de diferentes tamaños en suspensión en el aire que respiramos", mientras que otras se ingieren a través de conducciones de agua potable. Entre esas enfermedades se encuentran el cáncer de pulmón o el mesotelioma pleural, entre otros. Y pueden tardar decenios en manifestarse, “en algunos casos, más de 40 años”. Por eso, exigen a las administraciones que, en materia de asbesto, adopten todas las resoluciones del 2013 y la Directiva 2015 del Parlamento Europeo.

Obras peligrosas

En lo que respecta a los espacios privados, las asociaciones vecinales explican que muchas de las obras de reforma, rehabilitación y derribo que se llevan a cabo en los edificios no cumplen los requisitos legales. Y que en pocos de ellos se realiza una identificación y evaluación de materiales con amianto para “minimizar o eliminar el riesgo de dispersión de fibras en el entorno inmediato”.

Por ello, ruegan “a todos los ayuntamientos que insten a los Gobiernos catalán y español a crear las leyes que sean necesarias para llevar adelante esta labor”. Y que se reclame, también a la Unión Europea, "todas las ayudas técnicas y económicas necesarias”.

Ambas cartas fueron redactadas con la colaboración de la plataforma de Jubilados de Macosa-Alstom Afectados por el Amianto. La petición de la FAVB se enmarca dentro de su ciclo de conferencias "Contaminaciones ocultadas". Tras haber realizado un primer fórum vecinal sobre el amianto, el próximo martes 26 de marzo ofrecerá otro que versará sobre la gestión de residuos. La cita será a las 19:30 h en el Casal Pou de la Figuera de Barcelona. El 11 de abril está previsto otro sobre contaminación electromagnética.