Ya son 20 los trabajadores de TMB que sufren las efectos de la exposición al amianto. Los afectados tienen alteraciones pleurales que pueden estar relacionadas con la exposición a esta sustancia, aunque no precisan de tratamiento médico.
Según Transports Metropolitans de Barcelona, esta dolencia no se puede considerar una patalogía grave, y explica que solo se ha recomendado un "control periódico más frecuente" dentro del programa de vigilancia de los afectados. De los 1.000 trabajadores que integran el colectivo que podría haber estado expuesto, unos 620 se han sometido a la primera fase del examen voluntario de la compañía.
Resulto de los examenes voluntarios
Los resultados de estas evaluaciones médicas recogen que hay 17 casos de engrosamientos pleurales, dos de placas pleurales no calcificadas y uno más de de placa pleural calcificada.
Además, la compañía ha contactado con el personal contratado durante los últimos 15 años que haya podido tener contacto con el elemento tóxico para que acudan a un centro de salud para realizarse un reconocimiento médico.
Trenes con amianto
En noviembre TMB detectó asbesto en más de 70 trenes. Ahora la empresa ha iniciado el proceso de adquisición de nuevos vagones para sustituir los antiguos de la L1 y la L3, tras detectar restos de pintura con esta sustancia en algunos de ellos, difíciles de eliminar.
El proceso de sustitución tendrán un coste cercano a los 500 millones de euros, y también prevé retirar de la estación de la Verneda unas planchas de fibrocemento.