El cerebro es uno de los órganos más estudiados por la ciencia en los últimos años. Muchos investigadores han centrado sus trabajos en confirmar hipótesis sobre las diferencias que se esconden tras un cerebro masculino y otro femenino y, aunque bien es cierto que el cerebro tiende a encogerse con la edad independientemente del sexo, el tiempo desgasta de manera diferente los cerebros de hombres y mujeres.
Un grupo de científicos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis (Estados Unidos) ha descubierto que los cerebros de las mujeres parecen ser unos 3'8 años más jóvenes (más activos en comparación con su edad cronológica) y los cerebros de los hombres 2'4 años más viejos que su edad real. Este hallazgo podría ser un indicio de por qué las mujeres tienden a permanecer mentalmente agudas durante más tiempo que los hombres.
¿Qué provoca este desajuste?
Para la investigación, los especialistas de la Universidad de Washington realizaron tests y pruebas a 205 participantes adultos con edades entre los 28 y 82 años, sin ninguna dificultad cognitiva. Les midieron el flujo de oxígeno y la glucosa, considerada el ‘combustible’ del cerebro, y el organismo y la actividad metabólica de este órgano. Si bien durante la infancia y la juventud los cerebros necesitan altos niveles de glucosa para alcanzar la maduración y el desarrollo total, dichos niveles merman y se estabilizan hasta cantidades casi mínimas alrededor de los 60 años.
Pareja de ancianos / UNSPLASH
De acuerdo con los resultados, los expertos concluyeron que el desajuste entre las edades se debía fundamentalmente a cuestiones asociadas con las hormonas. Entre ellas, el hecho de que las mujeres tienen menos pérdida de flujo sanguíneo cerebral tras la pubertad, más glicólisis durante la edad adulta joven y menos pérdida de proteínas, lo que supondrían diferencias que van preparando el escenario para las posteriores trayectorias del envejecimiento cerebral. De este modo, las mujeres presentan la maduración cerebral con anterioridad y mantienen durante más tiempo un metabolismo elevado, lo que se traduce en más juventud.