El Gobierno del País Vasco ha acordado con el sector del taxi y de los VTC que la contratación de este tipo de vehículos se haga con una antelación mínima de una hora. Las únicas excepciones a este límite de tiempo se producirán cuando el servicio se efectúe con clientes cuya relación es continua, como pueden ser casos de urgencias, con mútuas o seguros.

El acuerdo alcanzado en la Mesa del Taxi de Euskadi, conformada por Gobierno vasco, la Federación vasca del Taxi y los representantes de los VTC, define las principales directrices del nuevo reglamento para éstos últimos.

"No ganan unos ni otros"

La directora de Planificación del Transporte de Gobierno Vasco, Janire Bijueska, ha considerado un "triunfo" el tono de la reunión y la voluntad "construtiva" de las partes para evitar "cualquier confrontación, que era la prioridad". Bijueska ha indicado que en la reunión se han consensuado los aspectos más generales, "refrendados por todas las partes", de cara a seguir trabajando en una próxima mesa y desarrollar la parte dispositiva.

"Hoy no ganan unos ni otros, sino la sociedad vasca. Gracias a este acuerdo, conseguimos regular el sector de las VTC de forma que conviva de manera ordenada con el del taxi, ambos servicios de diferente naturaleza, con una larga trayectoria en Euskadi, y que se pueden complementar de forma armoniosa", ha afirmado.

Excepciones

La responsable del Gobierno vasco considera "innegable" que la prestación del servicio de arrendamiento de vehículo con conductor "atiende unas necesidades que el cliente demanda" en unas "condiciones diferentes" a las que presta el taxi. Por ello, según ha indicado, la casuística de la prestación del servicio también tiene que "ser propia".

Por ello, la precontratación de los VTC deberá hacerse con una anticipación de una hora, salvo en el caso de urgencias, mutuas de accidente, asistencia en carretera, modificaciones en un servicio ya precontratado o en la relación empresas que "siendo clientes habituales, necesitan de unos servicios mantenidos en el tiempo porque su relación ya es habitual en el tiempo y no es esporádica".

Otras condiciones

Asimismo, se ha acordado que no puedan utilizarse los tránsitos en la vía pública para demandar el servicio. Por ello, los VTCs no podrán recoger clientes en la vía pública si no están prestando un servicio, y deberán estacionar en su base o aparcamiento fuera de la vía pública hasta requerir otro. Además, la geolocalización de los VTC será posible en un plano interno, pero no estará al alcance de los usuarios. 

El acuerdo contempla que, si por circunstancias sobrevenidas el conductor de un vehículo de arrendamiento con conductor precisara estacionarlo en vía pública para atender necesidades no relacionadas con el servicio, además de aparecer como fuera de servicio, no podrá prestar ningún servicio hasta transcurrida una hora desde su regreso al vehículo, para garantizar los términos exigidos de la precontratación y evitar que cualquier cliente al verlo estacionado formalice un servicio en la vía pública.

En el acuerdo se establece también que las VTC están vinculadas a un coche y no al conductor y, así como los taxistas obtienen una licencia por persona física, las autorizaciones de VTC permiten el servicio a los vehículos.

La Federación del Taxi ha calificado de "positiva" la reunión. Uno de sus portavoces ha señalado que el Ejecutivo autónomo está demostrando "una gran responsabilidad" elaborando una normativa que "va a poder facilitar que los dos modelos convivan en Euskadi". El representante de las VTC ha declinado hacer declaraciones y ha asegurado que no tenía "nada que decir".