¿Dónde comprar el mejor fuet de toda Cataluña?

Los embutidos forman parte de la rica gastronomía que hay en España, pero, entre todos ellos, el fuet es uno de los más destacados. Este tipo de longaniza, hecha a base de carne de cerdo picada, sal y pimienta, es uno de los productos más consumidos, por detrás del jamón cocido y el jamón curado. Poco a poco, ha ido ganando el reconocimiento de un gran público que lo consume de forma regular, pues no es exclusivo de Cataluña. Sin embargo, los caseros que todavía se elaboran de la forma tradicional sólo se pueden encontrar en determinados puntos de la región.

La gran diferencia de este embutido respecto a la longaniza es el tamaño, ya que tiene un diámetro aproximado de 35 milímetros. Es su forma la que le ha dado su nombre ya que fuet en catalán significa fusta o látigo. Éste se consume crudo, cortado en lonchas no demasiado finas y acompañado de pan y vino, por norma general. Sin embargo, hay un debate que depende mucho del tipo del tipo de embutido que sea y es el de comerlo con piel o sin ella. Así, dependendera de si el producto es industrial o artesano, ya que mientras el primero está creado a partir de celulosas o poliamidas que no siempre son comestibles, mientras que en el artesanal se utilizan la propias tripas del animal.

Vic, el rincón del fuet en Cataluña

De entre todos los municipios donde todavía se elabora de forma tradicional, Vic es uno de los más característicos y representativos, con algunos de los mejores productos que se pueden encontrar. Esto es debido al clima con el que cuenta, ya que ayuda a un buen secado del fuet. Una vez se ha picado la carne de cerdo, se añade la sal y la pimienta para embutirla en la tripa natural. Tras esto se ata y se deja secar. Lo habitual es tenerlos menos de 25 días a una temperatura que no supere los 15 grados, aunque hay algunos que pueden tener hasta noventa días de curación.

Fuet y otros embutidos / GENERALITAT DA CATALUNYA

Fuet y otros embutidos / GENERALITAT DA CATALUNYA

En Vic se encuentran productos de gran calidad en Ca la Teresona, Can Solà, Can Vilada, Can Valeri, Rebost d'en Pau, la Casa Riera Ordeix o la Casa Sendra. También hay productores artesanales en Cerdanya, el Pallars, el Vallès, el Ripollès o la Garrotxa. Aunque la gran mayoría sigue el mismo método de elaboración artesanal, la diferenciación en la materia prima y en los procesos de secado hace que se puedan apreciar matices entre cada uno de ellos.

Otros embutidos típicos de Cataluña

Siguiendo unas elaboraciones diferentes, hay productos similares al fuet que en otras zonas de Cataluña. En El Pallars es reconocido el xolís, elaborado con carne de cerdo y muy carecterístico de los Pirineos leridanos. Es un embutido seco preparado con carne y un poco de grasa de cerco, aderezado con sal y pimienta. Se puede adquirir en Can Alfons o en La Torre de Cabdella, donde también tienen secallona. La girella, de carne de cordero del Pallars y la Alta Ribagorça, se prepara con menudillos de cordero, tocino, carne de cerdo, arroz, pan, huevo, pimienta negra, ajo, canela, sal y perejil; y se embute en tripas de cordero. Se sirve frita, rebozada o con salsa.

Por su parte, la butifarra es, probablemente, el otro gran embutido que define a Cataluña en el resto de España. Es muy similar al fuet, pero de mayor grosor. Se puede tomar tanto cruda como cocida. El paltruc o bull es la butifarra más gruesa de todas, que se elabora a partir de la vejiga o del intestino griego del cerdo, con carne picada y grasas adobadas como relleno.